El acto de apertura de curso de la Escuela de Abogados de la Universidad Europea y el despacho de abogados Cremades & Calvo-Sotelo celebrado este miércoles en el Campus de Alcobendas de la institución educativa ha contado con la participación del ministro de Justicia, Rafael Catalá. Asimismo, a la cita han acudido la decana del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid, Sonia Gumpert, el decano del Ilustre Colegio de Abogados de Málaga, Francisco Javier Lara Peláez, el presidente del bufete, Javier Cremades, y la decana de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación de la Universidad Europea, Marta Muñiz.
La Escuela de Abogados es una iniciativa destinada a formar abogados técnicamente excelentes que aporten soluciones complejas a los problemas actuales de las empresas y de las personas. Con esta alianza, ambas instituciones buscan revolucionar la enseñanza del Derecho con un valor agregado único, una formación dual que trasciende los límites de los tradicionales sistemas de formación en el ámbito del postgrado. Una formación en la que no solo se estudia Derecho, sino que se aprende a ser abogado mediante la inmersión plena desde el primer día en el mundo real del ejercicio profesional de alto nivel, haciendo prácticas en el propio despacho y ejerciendo la profesión con la orientación de varios de los más prestigiosos y experimentados juristas nacionales e internacionales.
En este sentido, ha destacado el ministro de Justicia durante su intervención, que el ejercicio de la abogacía “ha experimentado un cambio radical en los últimos 15 años”. Un cambio que demanda iniciativas nuevas e inteligentes como esta Escuela de Abogados fruto del esfuerzo de dos instituciones lideres y con una clara visión compartida de lo que hay que hacer, capaces de adaptarse y ofrecer respuestas de calidad a la sociedad cambiante.
En la misma línea, la decana del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid ha saludado esta iniciativa destacando su carácter pionero e innovador.
A este respecto, el presidente del bufete, Javier Cremades, ha subrayado el valor único de la “inmersión plena” de los alumnos en el ejercicio profesional, de la mano de “experimentados juristas que les transmiten las claves fundamentales del ejercicio de la abogacía en una sociedad abierta, exigente e innovadora”. Una vivencia que les permitirá “estar a la altura de las necesidades globales de nuestros clientes y del liderazgo ético que nos demandan los ciudadanos”.
Ha insistido en la desconexión entre Universidad y empresa que todavía puede apreciarse en numerosas facultades, ya que “aún nuestras aulas están llenas de personas que conocen el Derecho pero no las industrias”. Tal y como ha destacado, la Escuela de Abogados busca dar respuesta a esta problemática, ya que es preciso “volver a conectar el trabajo de las empresas con las necesidades de la sociedad, la creación de valor compartido”. “Crear valor compartido para nosotros es un arte, una necesidad. La Escuela de Abogados es nuestra apuesta para crear valor compartido en abogacía”, ha añadido.
Por su parte, la decana de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación de la Universidad Europea, Marta Muñiz, ha recordado que “la Escuela está implantada en el mundo del ejercicio profesional para facilitar al graduado la tarea de incorporarse rápidamente y con éxito al ejercicio efectivo de la abogacía”. Según Muñiz, esto es posible a través de los programas de Master en Dirección de Asesoría Jurídica de Empresa, Master en Derecho y Negocio de las Telecomunicaciones, Internet y Audiovisual y Master en Derecho y Negocio de la Energía.