"Las personas que trabajan desde su casa tienen exactamente los mismos derechos que en la ley que tendrían si estuvieran trabajando desde la oficina y debemos asegurarnos de que se cumpla ese principio", ha remarcado Lynch en un comunicado.
La confederación, de la que UGT forma parte, ha asegurado que el 40% de los trabajadores de la Unión Europea continúa trabajando desde sus hogares.
Para el movimiento sindical europeo, el teletrabajo se volverá más permanente para mantener el distanciamiento social en las oficinas. Además, ha señalado que empresas como Twitter, Dell y Facebook ya han ampliado de manera permanente esta modalidad.
La CES ha señalado que apoya el "teletrabajo" para la mayor cantidad de trabajadores posible en estas circunstancias excepcionales, pero estará atenta a que esta relación laboral no desdibuje la línea entre el tiempo profesional y el personal.
No obstante, ha puesto de relieve que la última encuesta de condiciones de trabajo de la Unión Europea muestra que las personas que teletrabajan tienen el doble de posibilidades de trabajar 48 horas o más a la semana que los que trabajan en las instalaciones de la empresa, pero que además también tienen seis veces más de probabilidades de trabajar en su tiempo libre.
Según el Parlamento Europeo, estos efectos negativos están causados por el monitoreo gerencial, la demanda de disponibilidad constante y los límites entre el trabajo y la vida privada.
En el comunicado, la confederación ha trasladado a los empresarios que se deben mantener las horas normales de trabajo, que son responsables de proporcionar a las personas trabajadoras la capacitación y el soporte técnico necesarios y que deben respetar la privacidad de los teletrabajadores.
"La carga de trabajo y los estándares de desempeño son los mismos que para las personas empleadas que están en las instalaciones de la empresa", ha apuntado, tras afirmar que los empresarios también son responsables de tomar medidas para garantizar que los trabajadores no se aíslen.