Entrevistamos a Arancha Roca y Álvaro Jiménez, con ocasión de su reciente incorporación como nuevos Socios del Área de Consultoría de Auren que se unirán a la oficina de Sevilla, desde donde darán apoyo a toda la firma de servicios profesionales.
1.- ¿Por qué potenciar consultoría desde la oficina de Auren en Sevilla?
Era un buen momento para apostar por reforzar en Andalucía la división de consultoría. Los servicios de auditoría de la firma, por ejemplo, han crecido muchísimo en la zona en los últimos años, sin embargo, la consultoría no lo había hecho tanto. Ahora, en cambio, nos enfrentamos a retos derivados de las circunstancias de la pandemia, de las necesidades de transformación digital y de la propia competencia por la globalización que hacen necesario el refuerzo de la estructura de consultoría en Andalucía para prestar servicios desde allí a empresas y también a la administración pública. Eso sí, trabajamos desde allí y potenciamos los servicios en la Comunidad, pero trabajamos en conjunto para toda España.
2.- ¿Qué servicios son los más destacados en consultoría en Auren?
El área de consultoría es amplia en nuestra organización. Podemos abordar desde los procesos de gestión de Recursos Humanos, consultoría estratégica, transformación digital e innovación, hasta cualquier otro aspecto relacionado, siendo especialmente importante la línea de ayudas para la obtención de fondos Next Generation, con la apertura de nuestra oficina Auren Next Generation EU.
3.- ¿Qué es Auren 360 y por qué cada vez es más importante ofrecer al cliente una solución omnicomprensiva o de 360º?
Se trata de una oferta de servicios completa que trata de poner al cliente en el centro. Solo a través del conocimiento del mismo, de su configuración, de su estrategia, del modelo de negocio y de su orientación se puede ofrecer una solución global que permita un abordaje holístico de los problemas o de las necesidades.
Desde Auren contamos con un nutrido grupo de profesionales de consultoría, pero también de las otras divisiones: auditoría, abogados y corporate, que nos permiten, desde ese conocimiento profundo de la situación del cliente, realizar un abordaje global. La idea es que los clientes no se tengan que preocupar tanto por a qué área corresponde su problema, si no que se le de una solución 360 desde todas líneas de la compañía.
4.- ¿Hasta qué punto la pandemia afectará a los modelos actuales de gestión organizacional de las organizaciones de las empresas?
Ya está afectando. En un primer momento obligó a la implementación de herramientas para el teletrabajo y su gestión. Posteriormente, hemos visto modelos de trabajo que buscan el seguimiento de la productividad. En ese sentido somos optimistas, porque pensamos que las herramientas y los modelos existen y ello va a provocar un importante cambio de los sistemas de trabajo, que será positivo siempre que nos centremos en la capacidad de la persona para establecer “conexiones” con su entorno que motiven y permitan el “engagement” y el compromiso.
Hemos comprobado que los cambios han llegado para quedarse, por lo que es el momento de aprovechar y afrontar procesos de transformación corporativa en mayor o menor grado.
5.- ¿Cuáles son los riesgos que un modelo incorrecto de teletrabajo puede ocasionar en las empresas?
Ligada a la cuestión anterior está el tema de la “conexión del trabajador”. Solo serán exitosos aquellos modelos que sean capaces de mantener el compromiso del trabajador con su actividad, alineando el propósito de la empresa con el de éste; los que doten al trabajador de herramientas que persigan la eficiencia, pero dentro del respeto a los tiempos personales, y los que se orienten al cumplimiento de resultados y no tanto al presencialismo o a la tarea.
También se deben desarrollar propuestas que avancen en aspectos de mejora de la calidad de su tiempo, salud y entorno. Sabemos que puede sonar disruptivo, pero es que todo lo que nos está ocurriendo lo es. Solo podemos responder de una forma diferente.
6.- Se habla del transhumanismo, pero no sé hasta qué punto también cabría hablar del transcorporativismo. Me explico ¿la deriva de desarraigo que propicia la deslocalización empresarial y laboral con los modelos de externalización de servicios, el ecommerce, la tecnología cloud y ahora el teletrabajo, cómo está todo ello afectando al concepto y la cultura organizativa que hasta ahora teníamos de la empresa? ¿estamos ante una evolución o una revolución del concepto empresa?
Es posible, pero no es algo nuevo. Quizá se ha visto potenciado por las actuales circunstancias. Efectivamente, el reto de la nueva era será crear patrones culturales que definan compañías que están abiertas al mundo en un escenario de diversidad. La relación empresa-trabajador va a cambiar. Retener el talento será mucho más exigente. El propósito, nuestro employer branding y la alineación con el de los trabajadores, serán claves para poder crear patrones aceptados y comunes que nos hagan nuestras empresas atractivas.
7.- ¿Qué principales desafíos plantea la irrupción de nuevas tecnologías como la Inteligencia Artificial en los sistemas de gestión de personas?
La inteligencia artificial será la gran herramienta de este siglo en las empresas. Sin duda, existen dos desafíos fundamentales: el primero, su implementación en aquellos procesos de interés, ya que no todas las empresas van a llegar y tampoco de la misma manera. El segundo, más complejo, quizás, será ser capaces de reservar las habilidades propias del ser humano como la empatía o el sentido común, que serán difícilmente sustituibles, y no olvidar cuánto aportan a nuestras empresas.
8.- ¿Los planes de igualdad se han de quedar solo en promover y garantizar la igualdad de género o hay que ir más allá y llevarla a otras áreas o materias en las organizaciones?
Es una buena pregunta. En Auren somos líderes en el desarrollo de planes de igualdad. El alcance viene determinado por la empresa. Nuestra recomendación, como en todos nuestros trabajos, es que cualquier proceso de consultoría que se emprenda tenga un verdadero significado transformador para la compañía y que no se quede solo en el cumplimento normativo. Seamos germen de cambio y de mejora continua.
9.- El binomio de formación a distancia o e-learning y teletrabajo a buen seguro generará interesantes sinergias y cierta fuerza centrípeta a favor de la productividad. Para aprovechar todo ello ¿habría que empezar a formar en las empresas a empleados y directivos en la gestión de la inteligencia colaborativa?
Sin duda, el modelo de formación evoluciona hacia la co-creación de conocimientos en los muchos modelos de colaboración existentes. Cada uno desde su expertise y capacidad. Sin duda, esa inteligencia colaborativa será la base del know-how de la organización del futuro.