El informe de PwC contempla que entre los beneficios que los trabajadores esperan obtener de esta nueva tecnología, el 76% señala la oportunidad de adquirir nuevas habilidades, mientras que el 73% cree que le ayudará a ser más creativo, y el 72% asegura que mejorará la calidad de su trabajo.
Además, el 62% espera que la IA generativa les ayude a ser más eficientes y el 49% a conseguir unos mejores salarios. En este contexto, dicho análisis revela que la percepción positiva es todavía mayor, con porcentajes superiores al 90%, entre aquellos empleados que ya usan la IA habitualmente, aunque todavía el acceso a este tipo de tecnología en las empresas es muy limitado, ya que solo el 12% la utiliza diariamente y uno de cada cuatro encuestados no tiene acceso a este tipo de herramientas en el trabajo.
Generar información falsa
En este sentido, el estudio destaca que si las compañías quieren maximizar los beneficios de la IA es importante, primero, que empoderen a sus plantillas para que puedan experimentar con ella y, en segundo lugar, darles la formación necesaria, independientemente del sector al que pertenezcan o el papel que desempeñen en la compañía.
Pero, además de las ventajas de la IA, los empleados no son ajenos a los riesgos y desafíos que vienen con esta tecnología y que tienen que ver con la posibilidad de aumentar los sesgos en el trabajo o generar información falsa, cuestiones que arguyen un 52% de los trabajadores, o cambiar de forma negativa la naturaleza de su empleo, tema que preocupa al 47% de los encuestados.
En este contexto, el informe señala que para minimizar estos riesgos son "fundamentales" la educación y la capacitación, tanto de los empleados como de los directivos, sobre su uso responsable, al tiempo que es importante enfatizar la necesidad de que la IA siempre debe estar rigurosamente supervisada por las personas así como tener feedback de los empleados y crear los canales necesarios para que compartan sus experiencias.
Ritmo de cambio vertiginoso
Por otra parte, una de las cuestiones que mejor se refleja en el informe es que el entorno laboral y los empleados están inmersos en la actualidad en un ritmo de cambio vertiginoso, y es que el 62% de los encuestados aseguran que, en los últimos doce meses, los cambios en sus trabajos han aumentado sustancialmente y el 44% dice no entender por qué.
Estos cambios se concretan principalmente en el aprendizaje de nuevas tecnologías -según el 45%-, en la modificación de las estructuras de los equipos (41%), en el cambio en las responsabilidades diarias (40%) o en la naturaleza de los puestos de trabajo (35%). De hecho, la encuesta revela que casi la mitad de los empleados (45%) ha visto aumentar su carga de trabajo en el último año.
En general, según indica el documento, tanto los directivos como los empleados están alineados en que la tecnología, el cambio climático y la dinámica competitiva del mundo de los negocios va a transformar sus empresas y sus puestos de trabajo. Sin embargo, los empleados son más optimistas que en años anteriores sobre su situación laboral y sobre el compromiso con sus compañías.
Caen del 60% al 52% empleados financieramente apurados
Entrando al detalle, el 60% de los empleados -cuatro puntos más que en la encuesta del año pasado- afirman estar razonable o moderadamente satisfechos con su trabajo y más de la mitad (57%) de los que consideran la remuneración un aspecto clave de su empleo, reconocen estar bien pagados.
En este sentido, aumentan del 38% al 45% el porcentaje de los empleados que se muestran confiados sobre su situación económica y caen del 60% al 52% los que están financieramente apurados. Finalmente, la edición de este año de 'Hopes & Fears', revela que la capacitación se ha convertido en una cuestión tan valiosa para los empleados que la consideran un factor diferencial de la compañía.
Así, casi la mitad de los empleados afirman que las oportunidades para aprender nuevas habilidades son un aspecto fundamental a la hora de decidir si permanecen en su empresa o buscan otro trabajo.
