La retribución de los consejeros y directivos y el nuevo papel que tendrán las juntas generales de accionistas para fijarla ha sido objeto de debate en la sede del Col.legi d'Economistes de Catalunya, en una jornada coorganizada con Bufete Barrilero y Asociados. Juan Antonio Caubet, coordinador de unidad de negocio y José Ramón Mínguez, socio director de la división laboral de Barrilero, expusieron a lo largo de la jornada los significativos cambios que la reciente sentencia del Tribunal Supremo tendrá a partir de ahora en las políticas de remuneración para consejeros y directivos en las sociedades mercantiles no cotizadas.
A lo largo de la jornada se puso de manifiesto que la sentencia del Tribunal Supremo representa un giro radical y otorga nuevas garantías para socios o accionistas, que no se verán sorprendidos por remuneraciones desproporcionadas, no previstas en los estatutos de la sociedad o por encima del importe máximo anual fijado por las juntas de accionistas para el conjunto de los administradores sociales.
Los juristas explicaron la necesidad de revisar los estatutos sociales de las sociedades mercantiles no cotizadas, tanto anónimas como limitadas, sobre todo si existe un consejero delegado remunerado, y asimismo la conveniencia de que los ejecutivos revisen su situación remuneratoria y sus contratos, de forma que encajen con los estatutos sociales y los acuerdos adoptados por las juntas de accionistas. La sentencia del Tribunal Supremo, explicaron, supone una apuesta por la transparencia y los accionistas pasan a tener una herramienta de control sobre los consejeros delegados de las empresas.
