Una obra esencial tanto para artistas, galeristas, marchantes, casas de subastas y coleccionistas, así ccomo para sus asesores

Lefebvre publica el libro Régimen tributario del arte en España

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El mercado del arte en España ha experimentado un notable crecimiento. La Cuenta Satélite de la Cultura en España ofrece el aporte, al Producto Interior Bruto cultural, de las artes plásticas o visuales (5,8 millardos de euros), que incluyen actividades vinculadas a la pintura, la escultura, la fotografía, etc., y que se sitúa en el 21,5 por 100 en 2021.

Regimen Tributario Arte

En los últimos años, el subsector con mayor dinamismo ha sido el arte contemporáneo, cuyas ventas en España crecieron un 17 por 100 en 2021 respecto al año anterior, frente al descenso del -2 por 100 en el segmento de arte antiguo y moderno. Esta tendencia se explica, en parte, por el auge de ferias como ARCO, Art Madrid y Art Week, en la capital, o la valenciana Hybrid, que se han consolidado como plataformas impulsoras. Este segmento aglutinó el 47 por 100 de las ventas en el mercado español en 2021, frente al 34 por 100 del arte moderno y el 19 por 100 del antiguo.

Todo ello pone de manifiesto la importancia del arte en la economía española, además de ser un espejo de la imagen de España en el mundo. Pese a lo anterior, en el mundo editorial español se echaba en falta un análisis detallado de la relación entre el arte y los tributos, elemento esencial para la toma de decisiones en todas estas operaciones. Por ello, Lefebvre ha publicado el libro Régimen tributario del arte en España, una obra pionera y esencial para comprender dicha relación y que ha coordinado Javier Martín, catedrático de Derecho Financiero y Tributario y Socio Director de Ideo Legal.

En el prólogo, Jesús Gascón, secretario de Estado de Hacienda, afirma que se “trata de un libro con un contenido cuya lectura posiblemente sea compleja para aquellos que no estén habituados al mundo tributario, pero a su vez estoy seguro de que esa lectura o consulta será plenamente satisfactoria en cuanto al objetivo perseguido, que es el de, en palabras de su coordinador, servir de guía práctica para todos aquellos que lo necesiten”.

La obra se inicia con una serie de Preámbulos, a modo de rodeo o digresión antes de entrar en materia. El primero corresponde a Javier Lasarte, catedrático de Derecho Financiero y Tributario, que plantea algunas de las cuestiones más controvertidas de la relación del arte y los tributos. El segundo, es de Pilar Citoler, gran coleccionista de arte contemporáneo, sobre el pasado y presente de este último. El tercero, de la pluma de Genoveva Dancausa, profesora de estadística, se centra en los aspectos económicos, mientras que el cuarto, de Sergi Garzón, coordinador de la Escuela FETTAT de Fiscalidad y Empresa, nos acerca a esas nuevas obras de arte que son los NFTs. Finalizan con los dedicados al régimen jurídico de las relaciones entre artistas y galerías de arte, a cargo de los abogados mercantilistas Pablo Díez y Eduardo Ferreiro.

El resto de autores, muy conocedores de la materia gracias a su labor profesional y la docencia e investigación universitaria, han escrito los 17 capítulos en que se estructura el libro, que comienzan dando noticia de una serie de conceptos previos, como qué debemos entender por arte y sus actores, las entidades sin fines lucrativos protegidas o los incentivos tributarios como técnica de fomento. Continúan con el estudio de las grandes figuras tributarias estatales, así como los impuestos locales y las aduanas. Los últimos capítulos están dedicados al régimen de las entidades sin fines lucrativos protegidas y los distintos incentivos previstos en la Ley del Mecenazgo, para terminar con una referencia a la dación en pago de bienes del PHE para saldar deudas tributarias.

Sus páginas no pretenden tratar, de forma exhaustiva, todas estas cuestiones, sino que ofrecen una guía, lo más práctica posible, sobre todas ellas. Al final figura una selección bibliográfica para ampliar los conocimientos sobre cada uno de los capítulos.

Por tanto, estamos ante una obra esencial tanto para los agentes del mundo del arte: artistas, galeristas, marchantes, casas de subastas y coleccionistas, como para sus asesores, de los ámbitos público o privado.