Esta alta distinción, creada en 1944, es concedida por el Ministerio de Justicia a aquellas personalidades que están relacionadas con el mundo de la Justicia, para premiar y recompensar hechos distinguidos o servicios relevantes de carácter civil en el campo del Derecho, circunstancias éstas que ha entendido concurren en la persona de Javier C. Sánchez, quien ha desarrollado su actividad profesional en la Procura durante los últimos treinta años; siendo en la actualidad, además, vicepresidente del Consejo General de Procuradores de España.
Las Cruces se otorgan para premiar los servicios prestados y la contribución al desarrollo y perfeccionamiento del Derecho y la Jurisprudencia, entre Funcionarios de la Administración de Justicia, Miembros de profesiones directamente relacionadas con la Justicia, Personas que hayan contribuido al desarrollo del Derecho, al estudio de los Sagrados Cánones y Escrituras y a la obra legislativa y de organización del Estado, Autores de publicaciones de carácter jurídico de relevante importancia y Fundadores y cooperadores de Entidades e Instituciones que tengan por finalidad el perfeccionamiento de la técnica del Derecho y la Jurisprudencia. Se pueden conceder tanto a nacionales como a extranjeros.