"Estamos esperando los informes de los órganos consultivos, ahora está en el último de los órganos consultivos y en las próximas semanas lo tendremos. Entrará en el Parlamento en diciembre para que, dependiendo de cómo vayan las sesiones en el Congreso y el Senado pueda ver cuanto antes la luz", ha señalado.
Camarero contestaba así a preguntas de los grupos de la oposición en la Comisión de Igualdad del Senado, donde comparece por primera vez desde que llegó al cargo, hace ahora siete meses, para explicar las líneas generales de trabajo de su departamento. Según ha dicho, los dos proyectos, uno de ley orgánica y otro de ley ordinaria, "tienen novedades muy importantes" por lo que el Gobierno está "muy implicado" para que "salgan lo antes posible".
En declaraciones a los medios ha añadido después que el Plan de Familia que deberá complementar la reforma con medidas de apoyo a la maternidad, aún está en marcha y no tiene fecha prevista de aprobación. "Seguimos recogiendo medidas y haciendo mayor y más grande e importante este plan y cuando tengamos todas las medidas que los ministerios están dispuestos a darnos y hayamos hablado con todas las asociaciones que están haciendo aportaciones, estará preparado", ha añadido.
Será en esta nueva regulación donde se incluya la anunciada modificación de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo para que las jóvenes de 16 y 17 años necesiten consentimiento paterno para poder abortar, después de que el Gobierno retirase un anteproyecto que proponía la derogación de toda la normativa vigente para devolver el aborto al Código Penal, con un sistema de supuestos.
Para Camarero, "retirar el anteproyecto ha sido una decisión sensata, coherente y responsable ante la falta de consenso" y no implica la existencia de "ninguna contradicción entre el Partido Popular y el Gobierno". "Desde el minuto cero el presidente del Gobierno dijo que no seguiría adelante con este anteproyecto si no había consenso. Hemos priorizado el consenso y la concordia", ha asegurado.
Con todo, ha añadido que el Gobierno seguirá "buscando las fórmulas para cambiar la ley" porque sigue sin gustarle, pero no aplicará "el rodillo moral" que, en su opinión, utilizó el Gobierno socialista para aprobar la regulación que ahora está en vigor.
