Esta reunión, que ha tenido ayer tarde por videoconferencia, tiene un papel preferente en la ronda de contactos bilaterales que Díaz está manteniendo con los máximos responsables de organizaciones internacionales y con ministros de trabajo europeos y extracomunitarios para abordar retos compartidos. El papel preponderante que tiene el gobierno de Estados Unidos en el concierto internacional y las históricas relaciones de España con el continente americano sumadas a la posición central en el marco europeo, han hecho de esta reunión un encuentro de gran relevancia para el presente y futuro de la relación entre ambos países.
Yolanda Díaz ha puesto en valor la trayectoria personal de Martin J. Walsh en defensa de los derechos laborales y le ha reiterado la felicitación por su nombramiento, que le trasladó formalmente en marzo, tras su designación por el presidente Biden.
Salario Mínimo Interprofesional
El secretario de Trabajo Walsh se ha congratulado por el incremento del Salario Mínimo Interprofesional recientemente adoptado por el Gobierno español.
El salario mínimo supone "más participación, más consumo, más dinero en los bolsillos de la gente. Es una obligación moral hacerlo", ha afirmado Walsh.
La ministra Diaz incidió en la importancia de equidad en términos salariales y explicó que ha tomado esta medida siguiendo las recomendaciones de la Comisión Asesora para el Análisis del Salario Mínimo Interprofesional promovida por el Ministerio. La senda adoptada conducirá, al término de la legislatura, a que el Salario Mínimo Interprofesional se sitúe en el 60% del salario medio de España, tal y como recomienda la Carta Social Europea Revisada, ratificada por España el pasado mes de junio.
Trabajo decente
La titular de Trabajo ha tendido la mano para desarrollar una labor conjunta en el marco de los foros internacionales y en el ámbito bilateral para trabajar en aras de alcanzar el objetivo común del trabajo decente cimentado en salarios dignos, condiciones de trabajo justas, mayor seguridad y salud en el trabajo e igualdad y no discriminación, elementos que ha calificado como "indisociables del empleo de calidad e imprescindible para mejorar el bienestar social de ambos países".
Contribuir a mejorar la vida de los ciudadanos y ciudadanas de España y Estados Unidos es ahora para el gobierno de España y la administración Biden un objetivo más prioritario que nunca para superar de manera justa los efectos económicos y sociales de la pandemia que las personas más vulnerables, especialmente mujeres y jóvenes, han sufrido de manera más acentuada.
Del mismo modo, la ministra ha hecho partícipe al secretario de Trabajo de Estados Unidos, Martin J. Walsh, de las reformas de modernización del mercado laboral. En particular, han tenido la opción de conversar al respecto del paquete de medidas comprometidas con la Comisión Europea, entre las que se encuentra, entre otras, la negociación colectiva, la temporalidad en el empleo, los contratos formativos o la subcontratación.
En este sentido, el secretario de Estado norteamericano y la ministra española han compartido la necesidad de que exista un equilibrio de fuerzas en el diálogo social y por ello han destacado la relevancia de contar con unas organizaciones sindicales robustas.
Diálogo social
La vicepresidenta también ha explicado el papel determinante que juega el diálogo social como herramienta que permite desplegar con eficacia y perdurabilidad medidas como la protección de las personas trabajadoras y del tejido productivo a través de los ERTE, las normas que regulan el trabajo a distancia o el reparto a través de plataformas o la transparencia retributiva para luchar en favor de la igualdad. Son algunos de los ejemplos que ha destacado Yolanda Díaz durante el encuentro.
Ambos titulares de trabajo se han emplazado a que los equipos de ambos departamentos mantengan un canal de colaboración preferente en el que se traten de forma bilateral las temáticas tratadas en la reunión de hoy, entre ellas, la evolución del salario mínimo, la economía en las plataformas digitales, el diálogo social y la negación colectiva.
