Trabajo no está obligado a negociar el incremento del SMI, sólo a realizar consultas, pero suele tratar de llegar a un acuerdo con sindicatos y empresarios.

El Ministerio de Trabajo convoca a sindicatos y empresarios para abordar la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) de 2026

Noticia

La última vez que CEOE y Cepyme respaldaron el aumento del SMI fue en 2020, cuando el SMI pasó de 900 a 950 euros mensuales.

Reunión para el salario 2025_img

El Ministerio de Trabajo ha convocado para este martes a sindicatos y empresarios para abordar la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) de 2026, según han informado a Europa Press en fuentes de la negociación.

Este encuentro tendrá lugar después de que Trabajo recibiera la semana pasada el informe de los expertos que le asesoran en el SMI y en el que se recomienda elevar esta renta mínima para 2026 en casi 37 euros al mes, hasta los 1.221 euros mensuales por catorce pagas, si se decide que siga exento de tributación, o subirlo en cerca de 56 euros mensuales, hasta los 1.240 euros al mes, si se opta por su tributación en el IRPF.

La idea es que, sea con tributación o sin ella, los perceptores del SMI cobren siempre el equivalente al 60% del salario medio, en virtud de lo establecido en la Carta Social Europea.

Fuentes del Ministerio de Hacienda han indicado a Europa Press que el Departamento que dirige María Jesús Montero está abierto a analizar la actualización de la deducción vigente en el Impuesto de la Renta Sobre las Personas Físicas (IRPF) para adaptarla a la subida que experimentará el salario mínimo interprofesional el próximo año.

Para la subida de 2025, que situó el SMI en 1.184 euros al mes, los ministerios de Hacienda y de Trabajo acordaron que los perceptores de esta renta mínima no tuvieran que tributar en el IRPF.

Para ello, se introdujo una deducción en la cuota del IRPF que hará que los asalariados que cobran el SMI o menos no tributen el IRPF en la declaración de la renta de 2025 (que se hace en 2026).

En concreto, se aprobó una reforma para aplicar nuevas deducciones para los contribuyentes con rendimientos íntegros del trabajo, derivados de la prestación efectiva de servicios correspondientes a una relación laboral o estatuaria, inferiores a 17.256 euros.

La deducción alcanza los 340 euros anuales cuando los rendimientos son inferiores al SMI de 16.576 euros actual y disminuye ligeramente hasta los 17.256 euros.

La ley en vigor establece que el importe de la deducción prevista en este apartado no podrá exceder de la parte de la suma de las cuotas íntegras estatal y autonómica que proporcionalmente corresponda a los rendimientos netos del trabajo.

Aunque finalmente los socios de Gobierno llegaron a un acuerdo entonces, la tributación del SMI produjo encontronazos entre la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

Mientras que la ministra socialista defendía que el SMI tenía que empezar a tributar en el IRPF con la subida de 2025, la líder de Sumar defendía justo lo contrario. De hecho, el grupo plurinacional llegó a presentar una proposición de ley para revertir la decisión de Hacienda, coincidiendo con que PP y Podemos que se posicionaron del mismo modo y también presentaron sendas propuestas legislativas.

Sin embargo, antes de que esas propuestas echaran a andar en el trámite parlamentario, Montero llegó a un acuerdo con Sumar para que las rentas que se encuentren por debajo del 60% del salario medio puedan deducirse el IRPF en la Declaración de la Renta.

Subida del SMI

La comisión de expertos que asesora al Ministerio de Trabajo para la subida del SMI de 2026 presentó el pasado viernes sus recomendaciones a la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

Los expertos plantearon a Díaz dos escenarios de subida de esta renta mínima para 2026: uno con tributación en el IRPF y otro, sin ella.

En concreto, los expertos han sugerido incrementar el SMI para el año próximo en casi 37 euros al mes, hasta los 1.221 euros mensuales por catorce pagas, si se decide que siga exento de tributación, o elevarlo en cerca de 56 euros mensuales, hasta los 1.240 euros al mes, si se opta por su tributación en el IRPF.

En términos porcentuales, estas subidas serían del 3,1% en el primer caso (sin tributación) y del 4,7% en el segundo (con tributación), que son las que los expertos recomiendan efectuar para que el SMI represente al menos el 60% del salario medio.

La propuesta de los expertos difiere de la presentada conjuntamente por CCOO y UGT, y de la que han hecho las patronales CEOE y Cepyme.

En concreto, las organizaciones empresariales han propuesto una subida del salario mínimo interprofesional de hasta el 1,5% para 2026, lo que supondría alcanzar los 1.202 euros brutos al mes, en catorce mensualidades, y no exentos de tributación en el IRPF.

Por su parte, los sindicatos CCOO y UGT han planteado un incremento de esta renta mínima del 7,5%, hasta los 1.273 euros brutos al mes por catorce pagas, con tributación obligada en el IRPF. No obstante, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, se ha mostrado dispuesto a "rehacer" la propuesta una vez conocido el informe de los expertos.

El Gobierno aprobó el pasado mes de febrero, con efectos retroactivos desde el 1 de enero de este año, subir el SMI en un 4,4% para este año, hasta los 1.184 euros mensuales por catorce pagas, 50 euros más que la cuantía fijada para 2024.

Este incremento fue fruto del acuerdo alcanzado entre Trabajo y CCOO y UGT y al que no se sumaron los empresarios. Así, la subida de 2025 se pactó en solitario con los sindicatos por quinto año consecutivo.