Fuentes del Gobierno confirman a Europa Press que la subida no será retroactiva desde enero, pero dejan en manos de la negociación con los agentes sociales si el incremento comenzará a aplicarse desde septiembre o ya en octubre.
En este escenario, Trabajo y los agentes sociales deberán acordar en qué porcentaje se incrementa el salario mínimo. Desde los sindicatos, tanto CCOO como UGT han reclamado reiteradamente la necesidad de incrementar el SMI e incluso habían anunciado movilizaciones si el Gobierno no accedía, mientras que, por el contrario, la patronal se muestra contraria, toda vez que el SMI ha experimentado entre 2018 y 2020 una subida del 31,8%, algo inédito en la economía española, y además todavía hay empresas y negocios que no se han recuperado de la crisis.
Los sindicatos piden no perder poder adquisitivo
El último dato de inflación se situó en el 2,9%, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE) referidas al mes de julio.
El mantenimiento del poder adquisitivo es, precisamente, el mínimo que plantean los sindicatos de cara a la negociación, con lo que piden una subida en el entorno de la inflación, que roza el 3%. Sin embargo, esta referencia se limitó al 0,9% a la hora de revalorizar las pensiones y el sueldo de los trabajadores públicos a principios de año.