A continuación, les ofrecemos un extracto de la obra Claves Prácticas sobre Teletrabajo, realizada por Antonio V. Sempere Navarro, catedrático de la Universidad Rey Juan Carlos y coordinador del Área Laboral de Gómez-Acebo & Pombo, y por Djamil Tony Kahale Carrillo, profesor titular de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social en la Universidad a Distancia de Madrid (UDIMA). Las características del teletrabajo se obtienen de las ventajas(1) e inconvenientes que conlleva el teletrabajo a la empresa, teletrabajadores y sociedad(2): Empresa Una de las ventajas es la reducción de costes; ahorro de espacio físico en las oficinas; mayor flexibilidad en la organización; adopta una mayor descentralización y delegación de funciones; captación de buenos profesionales, que con otras formas de trabajo, es imposible que pueda prestar sus servicios en la empresa; inexistencia de absentismo laboral; no implica concentración de trabajadores en un centro de trabajo; menor índice de situaciones de conflictividad, como la huelga; y acceder a nuevas bolsas de trabajo. Los inconvenientes que se presentan es que puede provocar reacciones negativas a los cambios de gestión, cuando no son aceptados por los directivos o el personal de la empresa; se dificulta la seguridad de la información, por fluir por redes externas a la empresa; la distancia de la sede de la empresa disminuye el contacto entre superiores y subordinados, incluyendo los propios empleados; y dificultades de control y supervisión. Teletrabajador Le permite organizarse según sus propias necesidades, supone un ahorro al evitarse el desplazamiento desde su domicilio hasta el centro de trabajo, mejora la posibilidad de conseguir empleo; la flexibilidad y la integración entre vida familiar y laboral, y aumento de calidad de vida. En cambio, como inconvenientes puede existir la sensación de aislamiento; la falta de supervisión por los superiores, produce la falta de motivación; la inseguridad por no existir una regulación legal que proteja a todos los tipos de teletrabajo; y, la adicción al trabajo o dependencia del estrés, conocido, a su vez, como «workahólic», que consiste en un apego patológico a la dedicación laboral, no con el objeto de alcanzar rendimientos o metas profesionales (lograr un ascenso, terminar un proyecto, ganar dinero, obtener una buena evaluación, entre otros), sino con el propósito de evadir conflictos psicológicos internos o de compensar otros. No es meramente que se trabaje por muchas horas, dado que el trabajador instrumentaliza psicológicamente su labor como forma de evitar o compensar otros problemas psicológicos(3). Sociedad En cuanto a las ventajas soluciona y facilita el acceso al mercado laboral de grandes colectivos; resuelve los problemas de congestión y de embotellamiento de tráfico que sufren las ciudades, dado que el teletrabajador no se trasladaría de su domicilio al centro de trabajo; la reducción de contaminación ambiental; facilita el desarrollo del trabajo desde zonas rurales, evitando la despoblación de las llamadas zonas deprimidas; y contribuye a la inserción laboral de las personas discapacitadas(4). Entre los inconvenientes disminuye las relaciones sociales entre los individuos; incumplimiento de la legislación laboral, así como la Seguridad Social; y, los posibles problemas en la implicación y participación de los agentes sociales. (Ver Tabla 2 y 3) Hay que destacar, no obstante, que grandes empresas del sector tecnológico, que han apostado por el teletrabajo, se han apartado de su implantación(5). En este sentido, los siguientes entes jurídicos: Telefónica, Yahoo y Hewlett Packard, no apuestan por el trabajo a distancia. La primera de las empresas nombradas, redujo más de un 60% el número de teletrabajadores, en vista de que era imposible medir los resultados y el desempeño de su actividad. La segunda, lo rechaza al señalar que las personas son más colaborativas e innovadoras cuando se reúnen de manera presencial. Finalmente, la tercera, en la misma línea que la anterior empresa, apunta que es mejor fortalecer una mejor colaboración e innovación entre todos los trabajadores. Más información en la obra Teletrabajo, perteneciente a la Colección Claves Prácticas.
*Notas: (1) GARCÍA MOJA, C. «Teletrabajo y psicología de las organizaciones: La revolución de los recursos humanos», AA.VV. (Coords. MARTÍNEZ LÓPEZ, F., et al), Teletrabajo una visión multidisciplinar, Universidad de Huelva, Huelva, 1998, p. 29. (2) (Tablas 2 y 3) HERNÁNDEZ NIETO, J. «El teletrabajo en España en los albores del siglo XXI», Revista Universitaria de Ciencias del Trabajo, núm. 2, 2001, p. 184. ESCUDERO RODRÍGUEZ, R. «Teletrabajo», Descentralización productiva y nuevas formas organizativas del trabajo, Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, Madrid, 1999, pp. 861-871. CIVIT, C. y MARCH, M. Implantación del Teletrabajo en la empresa, Gestión 2000, Barcelona, 2000, p. 286. (3) PIÑUEL Y ZABALA, I. Neomanagement, jefes tóxicos y sus víctimas, Aguilar, Madrid, 2004, p. 136. (4) KAHALE CARRILLO, D. Protección a las personas en situación de dependencia, Editorial Formación Alcalá, Jaén, 2012. (5) http://www.elblogsalmon.com/management/grandes-tecnologicas-siguen-plegando-velas-con-el-teletrabajo-que-esta-pasando?utm_source=feedburner_medium=%20feed_campaign=Feed%3A+elblogsalmon2+(El+Blog+Salm%C3%B3n)