Querido Ángel: dos líneas, sólo para recordarte nuestra cita del próximo miércoles, para que me entregues la actualización de tu libro.
No sé quién me ha dicho que viajabas esta semana, y no ibas a poder acudir.
¡Qué disparate!
¿Tú, incumpliendo un plazo, faltando a una obligación, dejando de atender un compromiso ?
El que me ha dicho que no podrías venir a nuestra cita, seguramente no te conoce. Seguro que no sabe que eres un profesional cumplidor, responsable, autor envidiable y envidiado por cualquier editor.
No te defino, porque sé que no te gusta, con esa sandez del Impuesto sobre Sociedades con piernas.
Prefiero definirte como amigo y persona.
Como amigo, íntimo; como persona, excepcional; amigo excepcional, persona íntima.
Fiscalista implacable, comentarista audaz de lo imponible, capaz de transformar en sentimiento la doble imposición de la tristeza. La doble imposición que ahora me angustia; que me genera pena irrefrenable, con ganas de llorar hasta el delito.
Esa misma tristeza, injusta y vengativa, de las cartas mal dadas; de la baza fallida, de no encontrar respuesta razonable a la pregunta simple y destructora de por qué tú, nadie más, tuviste que jugar la mano perdedora en la partida.
Perdóname Serrano, amigo Ángel, que me voy por las ramas dolorosas, y no termino de determinar la base liquidable del lamento. De este exacto dolor que ahora sentimos quienes, sin previo aviso, sin notificación en tiempo y forma, sin plazo preclusivo, sin ni siquiera levísimos indicios, firmamos por la fuerza el acta disconforme del destino.
En horas veinticuatro perdemos al amigo, al Autor, al referente vivo de lo cabal, lo noble y lo oportuno.
En hideputas horas veinticuatro has ido de la vida a la ceniza. Y aquí quedamos, inciertos declarantes del tributo cruel de tu silencio. De tu ausencia futura en nuestro mundo.
Hoy, ya te necesito. Necesito que encuentres el ajuste que me haga deducir el sufrimiento.
Lo encontraré, seguro, en tu memoria. En el ejemplo de amigo irreemplazable.
Gracias por tu amistad y por tu ejemplo. Gracias por permitir que declaremos la bonificación de tu recuerdo, la deducción del tiempo compartido.
Juan Pujol
Sobre Ángel Serrano
Ángel Serrano ha sido autor de numerosísimas publicaciones. Con Lefebvre - El Derecho elaboró destacadas obras como: Transparencia Fiscal 2001; Reforma Impuesto Sociedades 2007; Empresas de Reducida dimensión; Impuesto sobre Sociedades: Reforma Mercantil; Sociedades Patrimoniales 2006; Dossier Aumento y Reducción de capital; Planificación fiscal; Fondo de comercio; Contabilización de Impuestos y Casos Prácticos Impuesto sobre Sociedades
Asimismo, ha sido autor del Memento Autor Impuesto sobre Sociedades.
Falleció en Madrid, el miércoles 29 de marzo de 2017.
Descanse en paz.
