Durante su comparecencia ante la Comisión de Asuntos Económicos y Transformación Digital, a la que ha acudido para presentar el 'Informe anual' del Banco de España, ha reivindicado la necesidad de "equilibrar ingresos y gastos", ante la "presión significativa" que implica el envejecimiento de la población.
En este sentido, ha señalado que la reforma realizada por el Gobierno de Mariano Rajoy en 2013 "equilibraba ese problema", si bien ha recordado que sus niveles de revalorización --al 0,25% en situaciones de desequilibrio-- "parece que no son admisibles".
Por ello, ha pedido a los grupos que, si no se comparten estos índices, exista un acuerdo para "compensar de otra manera" las cuentas del sistema público de pensiones "para que el sistema sea sostenible".
LLAMA A "ARRIESGAR" EN EL MERCADO LABORAL
Otra de las reformas que ha defendido han sido las laborales, realizadas en 2010 por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, y la de 2012 por el Ejecutivo de Rajoy. "El Banco de España valoró positivamente las reformas de 2010 y 2012. Y lo seguimos pensando", ha dicho.
En todo caso, ha dicho que el organismo que gobierna "nunca ha dicho que resolvió todos los problemas", y en este punto ha citado el desempleo de larga duración, para la que ha pedido actuar con políticas activas de empleo, y la dualidad.
Para esto último, ha señalado que se trata de un "problema tan claramente identificado que no hay ni un motivo para no tomar ninguna decisión" y por ello ha llamado a "arriesgar". "No podemos estar paralizados, es momento de arriesgar", ha aseverado, citando como opciones la llamada mochila austriaca o los contratos con indemnización creciente.