El informe persigue abrir un diálogo sobre la concepción de iniciativas de políticas públicas que impulsen la adopción de los pagos digitales en España, así como detectar los desafíos y oportunidades que la transición del efectivo hacia los pagos digitales ofrece. Considera que los servicios de pago son un eslabón esencial en la infraestructura que dinamiza la economía española. Por ello, estudia y reune evidencias con el análisis de impacto de las políticas realizadas en otros países, para modelar una guía de sugerencias sobre cómo Gobierno y legisladores pueden respaldar la digitalización de los medios de pago con el objetivo de favorecer la economía del país.