El pasado 1 de enero, los medios de comunicación españoles se hicieron eco de la entrada en vigor en Francia de una medida incluida en la reforma de su ley laboral, que integraba por primera vez el ejercicio del derecho a la desconexión, para evitar el uso del correo electrónico y del teléfono móvil fuera del horario de trabajo.
Esta medida afecta a las empresas de más de 50 trabajadores que deberán poner en marcha, en palabras del legislador, «herramientas de regulación de los medios digitales», aunque no incluye medidas concretas ni prevé sanciones para las compañías incumplidoras.
Si bien es cierto que algunas grandes empresas ya preveían en su normativa interna prácticas de desconexión (p.ej. «Orange», «Michelin» o «Volkswagen»), esta medida supuso reconocer a nivel legislativo un derecho del trabajador hasta ahora inexistente en las regulaciones estatales.
Según recoge hoy Europapress, el Ministerio de Empleo y Seguridad Social está estudiando la posibilidad de impulsar una nueva normativa que reconozca el derecho de los trabajadores a la desconexión digital una vez finalice su jornada laboral.
Esta declaración surge de las iniciativas promovidas por los distintos grupos políticos, con PSOE y En Comú a la cabeza, que han registrado proposiciones no de ley emplazando al Gobierno a aprobar una regulación en este sentido, previo acuerdo con los agentes sociales, con el fin de evitar que los trabajadores continúen trabajando tras finalizar su jornada.
En Comú, formación integrada en el coalición parlamentaria de Unidos Podemos, reclama en esta iniciativa un plan de uso de las tecnologías de la comunicación fuera de la jornada laboral, el establecimiento de indicadores de medición de estrés laboral de los trabajadores en los estudios del Instituto Nacional de Estadística y la realización de un estudio que analice si el uso intensivo de las tecnologías de la información y de la comunicación puede llegar a provocar problemas de adicción o dependencia.
Por su parte, el PSOE ha registrado este lunes otra proposición no de ley en el Congreso de los Diputados en la que pide al Ejecutivo que regule la desconexión digital de los ciudadanos fuera del horario de trabajo mediante la reforma del régimen laboral, una modificación con la que también pretende que se garantice la privacidad e intimidad de los trabajadores en el ámbito del trabajo.