La nueva Ley de Sociedades de Capital, que persigue mejorar los derechos de los accionistas de las sociedades cotizadas e incorporar una Directiva del Parlamento Europeo, entrará en vigor el próximo mes de octubre, tras su publicación el pasado 2 de agosto en el Boletín Oficial del Estados (BOE).
La norma establece que las sociedades anónimas cotizadas garantizarán en todo momento la igualdad de trato de todos los accionistas que se hallen en la misma posición en lo referente a información, participación y ejercicio del derecho de voto en la junta general.
Cuando la sociedad ofrezca a los accionistas la posibilidad efectiva de votar por medios electrónicos accesibles a todos ellos, las juntas generales extraordinarias podrán ser convocadas con una antelación mínima de quince días.
La reducción del plazo de convocatoria requerirá un acuerdo expreso adoptado en la junta general ordinaria por, al menos, dos tercios del capital suscrito con derecho a voto, y cuya vigencia no podrá superar la fecha de celebración de la siguiente.
Asimismo, la sociedad cotizada está obligada a anunciar la convocatoria de la junta, ordinaria o extraordinaria, de modo que se garantice un acceso a la información "rápido y no discriminatorio" de todos los accionistas.
La Directiva europea aprobada el pasado 11 de julio aboga por suprimir los obstáculos que dificulten el voto de los accionistas y remover las dificultades legales para la participación electrónica en las juntas.
Por último, hace especial hincapié en permitir a los accionistas no residentes en el Estado miembro ejercer sus derechos con la misma facilidad que los residentes y el ejercicio de voto sin necesidad de asistir a la reunión.