También fue el primer presidente del Grupo de Abogados Jóvenes de la Corporación cuarenta años antes. Un hecho que, unido a una trayectoria profesional de 47 años, no viene sino a demostrar la dedicación y el compromiso de este prestigioso letrado con la abogacía.
De ahí que el Consejo General de la Abogacía Española haya entregado al colegiado granadino número 1.394 la Medalla al Mérito en el Servicio de la Abogacía, insignia aprobada por unanimidad de su Pleno que tiene como objetivo reconocer los méritos al servicio de la abogacía y sus organizaciones colegiales. “Respeto y gratitud es lo que tratamos de transmitir con esta distinción”, ha expresado la presidenta de la Abogacía Española, Victoria Ortega, que ha realizado un enorme esfuerzo para estar presente en Granada, pese al colapso circulatorio vivido durante la jornada. En este sentido, ha destacado del letrado el “gran sentido de la responsabilidad” y, sobre todo, el “concepto de lealtad demostrado a todos los niveles”.
No obstante, Ramírez ha indicado que tal reconocimiento no es más que fruto de “la entrega que he procurado mantener a lo largo de toda mi vida profesional con la Corporación que nos acoge y con esta bonita profesión”. Por ello, ha mostrado su agradecimiento al Consejo y el Colegio, a los compañeros y empleados y, especialmente, a su mujer, María Angustias, sus cinco hijos y once nietos, además de repasar con añoranza los hitos más relevantes de su carrera como abogado.
Pese a su humildad, razones para la distinción no han faltado. Y así lo ha expuesto el decano del Colegio de Abogados de Granada, Leandro Cabrera, durante una ceremonia dirigida a rendir homenaje a un compañero “tan querido y comprometido con el Colegio y la Abogacía como Manuel”. “Lo importante de una distinción no es el premio en sí; lo verdaderamente importante es haberlo merecido y Manolo ha hecho méritos suficientes para recibir esta medalla”, ha añadido el decano.
Por su parte, el decano emérito de la Abogacía granadina Rafael López Cantal ha repasado los logros profesionales de quien fuera Tesorero del Colegio durante una década, como abanderar el movimiento de la Abogacía Joven o lograr la no fácil implantación de los principios constitucionales en la profesión tras la transición. Pero, por encima de su impecable expediente, el también presidente de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de Granada ha alabado sus valores, que provienen de su vínculo desde su nacimiento con la Guardia Civil. Seriedad, trabajo, esfuerzo, disciplina, lealtad, tenacidad, rigor o compañerismo son algunos de los principios que han acompañado la vida de Ramírez en todas sus facetas. “No sólo ha defendido y asesorado bien a sus clientes, sino que siempre ha estado a disposición de los compañeros”, ha apostillado López Cantal, proponente de la distinción, con el apoyo de la Corporación profesional, entre otras instituciones. Un talante que ha sido recompensado con un Salón de Actos repleto de compañeros, amigos y familiares que han querido mostrar con su presencia el cariño y afecto al ilustre abogado.
Manuel Ramírez Rodríguez
Hijo de Guardia Civil, casado y con cinco hijos, Manuel Ramírez Rodríguez nació en Íllora en 1944. Cursó el Bachillerato en el Instituto Padre Suárez de Granada, accediendo por oposición al cuerpo de funcionarios del Estado en 1960 en la escala administrativa. Compaginó su trabajo con sus estudios en la Escuela Social de la Universidad de Granada (1962-1965), promocionando en el sector público a la escala ejecutiva en 1967. En 1968 solicitó una excedencia voluntaria para orientar su carrera profesional al sector privado, ejerciendo como director Comercial de una empresa química (1968 y 1977).
Mientras tanto, en 1971 se matriculó en la Facultad de Derecho de la Universidad de Granada, titulándose en 1976 y colegiándose en el Colegio de Abogados de Granada en marzo de 1977, donde sigue como ejerciente y en activo, perteneciendo a su vez al de Málaga entre 1982 y 1988. A nivel institucional, el colegiado número 1.394 fue el primer presidente del Grupo de Abogados Jóvenes de Granada (1979-1981) -organizando el Primer Congreso de Abogados Jóvenes de España en 1980- y es el presidente del Grupo de Abogados Seniors de la Corporación desde 2019. También ha formado parte de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Granada como Tesorero en dos mandatos (1981 y 1986), además de representar a la institución en diversas ocasiones ante las Juntas Generales de la Mutualidad de la Abogacía.
En el plano jurídico, en 1984 fundó su propio despacho, siendo en la actualidad y desde 2008 director del gabinete jurídico JURICOR en Granada. Asimismo, ha sido letrado del Banco Hispano Americano, de la Caja General de Ahorros de Granada, así como asesor jurídico de diferentes compañías. Es abogado de Cáritas Castrenses desde 2015.
También es Académico Correspondiente de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de Granada desde su toma de posesión en 2017 con el discurso ‘Estatuto Jurídico de la Guardia Civil’. En la esfera académica, fue profesor de la Escuela de Prácticas Jurídicas de Granada en el curso 1990/1991 y tutor de prácticas en la Facultad de Derecho de Granada en el curso 2016/2017, además de haber realizado diversas conferencias y publicaciones en materias de derecho y geografía e historia.