El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha anunciado que el Gobierno impulsará la creación de entidades de capital riesgo-pyme que podrán destinar el 70% de su inversión a financiar las pequeñas y medianas empresas.
En un desayuno informativo organizado por Europa Press, Guindos ha concretado que en los "próximos días" se recogerán estas medidas en un anteproyecto de ley que regulará a las entidades de capital riesgo y así como a entidades de inversión colectiva.
El objetivo pasa por mejorar el capital riesgo como fuente de financiación. Además, las exigencias de recursos propios de estas entidades se equipararán a la media europea y se impulsará el asesoramiento y gestión de las pymes.
Guindos ha subrayado que se tratará de un canal alternativo a la banca para las pymes que encuentran "dificultades" en un entorno de restricción crediticia. El titular de Economía ha adelantado también que se producirá una reducción de cargas administrativas para las gestoras de inversión y solo se requerirá autorización para su constitución.
Dentro del plan nacional de reformas que el Ejecutivo remitirá a Bruselas, el ministro ha enfatizado que la Ley Financiera perseguirá facilitar los procesos de refinanciación y reestructuración de deuda. "La situación de exceso de endeudamiento genera efectos contractivos en la actividad. Hay empresas viables a medio y largo plazo pero que con el nivel de deuda no lo son", ha explicado.
Guindos ha advertido de que si perdura un excesivo nivel de endeudamiento, se puede llegar a la desaparición de la empresa. "Es imprescindible para los trabajadores y la percepción del país que se modifique este sistema de refinanciaciones para que empresas viables continúen. El excesivo endeudamiento no debe ser la losa que impida la recuperación", ha ahondado.
Solvencia de la banca para apoyar la salida de la crisis
Por otra parte, ha indicado que la solvencia del sector financiero es una "condición necesaria" para la recuperación y para que la banca "empiece a apoyarla".
En este sentido, ha asegurado que el crédito ya está empezando a fluir hacia una parte de la economía y ha abogado por que fluya hacia sectores que se comportaron "adecuadamente" durante el ciclo expansivo de la economía.