"Para paliar esta carencia, resultaría de interés que la Comisión Europea diseñara algún tipo de mecanismo europeo de estabilización macroeconómica, como un seguro de desempleo supranacional, y fomentara proyectos de cooperación europeos, con el fin último de responder a retos globales, como el reducido crecimiento de la productividad, la digitalización, el envejecimiento o el cambio climático", señala la entidad.
El Semestre Europeo establece un calendario cuyo objetivo es coordinar la política económica de los Estados miembros de la Unión Europea (UE). En 2020, el Banco de España señala que el Semestre Europeo ha experimentado dos fases muy diferenciadas, antes y después de la irrupción de la crisis sanitaria.
En su estrategia anual de crecimiento sostenible, la CE promueve una economía basada en la estabilidad, la justicia y la equidad, la sostenibilidad medioambiental y la competitividad. Por su parte, en la recomendación sobre la política económica de la zona del euro la CE destacó como objetivos la reducción de desequilibrios externos y presupuestarios, el refuerzo de la formación y la participación laboral, la finalización de la Unión Bancaria y de la Unión del Mercado de Capitales, y la profundización de la Unión Económica y Monetaria (UEM).
Con posterioridad se han actualizado estas recomendaciones para recoger los retos derivados de la pandemia, como se ha acabado reflejando en las recomendaciones específicas por países aprobadas el pasado 20 de julio, que en el caso de España se han centrado en objetivos de inversión que faciliten un crecimiento sostenible e inclusivo, integrando la transición verde y la transformación digital.
El Semestre Europeo 2020 se ha adaptado a la situación de crisis vivida por la pandemia en tres dimensiones. En primer lugar, la activación de la cláusula de escape significa una suspensión temporal de las recomendaciones referidas a la construcción de colchones fiscales y los desequilibrios macroeconómicos.
En segundo lugar, las recomendaciones se han reorientado con el objetivo común, para todos los Estados miembros, de hacer frente a las necesidades inmediatas derivadas de la pandemia. Finalmente, el marco del Semestre Europeo desempeñará un papel central en los planes de recuperación y resiliencia, que serán claves para acceder a los recursos disponibles en el fondo de recuperación.
De este modo, los Estados miembros "tienen ante sí el reto de presentar planes de inversión y reformas estructurales en el marco de un calendario relativamente ajustado".