La Agencia, que tendrá su sede en A Coruña y con la que España también se anticipa a la entrada en vigor del Reglamento Europeo de Inteligencia Artificial, tiene el objetivo de ser "clave" en gestionar y liderar el ecosistema español de inteligencia artificial responsable.
Esta tarea se llevará a cabo mediante la supervisión de forma voluntaria hasta la entrada de la normativa europea en materia de inteligencia artificial a través de sellos de calidad y responsabilidad, las relaciones con el ecosistema europeo que fomentarán el desarrollo del Pacto por la Inteligencia Artificial, el Código de Buenas Prácticas de Inteligencia Artificial Generativa, producido dentro del Consejo de Comercio y Tecnología entre Estados Unidos y la UE, así como la generación de entornos de prueba regulados que permitan poner en marcha innovadores y desarrolladores de sistemas de inteligencia artificial de alto riesgo o de propósito general de manera responsable.
Además, la agencia contará con unas guías operacionales de implementación de los requisitos de la normativa europea en materia de inteligencia artificial que los usará para generar conocimiento entre el ecosistema sobre el cumplimiento de los requisitos, así como el acompañamiento en los cambios que se necesitan realizar para asegurar dicho cumplimiento, tal y como se detalla en el estatuto.
En la sesión constitutiva para su puesta en funcionamiento también se nombrará a la personal titular de la Dirección de la Agencia, a propuesta de la persona titular de la Presidencia.