En declaraciones a los periodistas en Sevilla durante la inauguración del I Congreso para el Estudio de la Violencia sobre las Mujeres, Lorente ha señalado que esta medida se toma para "evitar males mayores a los hijos durante el proceso de separación de sus padres, que es cuando su seguridad está más comprometida".
Ha asegurado que la propuesta es beneficiosa para "madres, hijos, padres que no son violentos e incluso padres violentos de cara a una posible impugnación durante el proceso", insistiendo en que la medida "tampoco va contra los jueces, sino que se les va a escuchar siempre".
De este modo, ha apuntado que es "necesario retirar a los menores, que ya han sufrido el maltrato en su hogar, del foco de la violencia, es decir, del maltratador para que dejen de ser víctimas y sean utilizados para seguir coaccionando e intimidando a la mujer víctima de la violencia machista".
"Nunca el procedimiento judicial puede ir contra los menores", ha recordado, indicando que es precisamente en el proceso previo a la separación cuando "existe un riesgo más alto para los hijos de violencia o coacción".
En este sentido, ha precisado que en un 12 por ciento de los casos, según los datos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) las denuncias interpuestas contra maltratadores no siguen adelante, debido a las "presiones y críticas a la que son sometidas las mujeres".
Además, ha dicho que esta realidad debe ser abordada con la verdadera entidad que tiene pues durante los últimos 5 años sólo se ha limitado la custodia en 11.000 casos cuando son "cientos de miles las denuncias que se han puesto".
Por otro lado, ha afirmado que le "sorprende mucho" que se diga que en los casos de violencia de género se conculca la presunción de inocencia y ha defendido que la propuesta de la retirada de custodia a los maltratadores "no entra en conflicto con este precepto, que no quita que se adopten medidas cautelares para preservar el interés del menor".