"Hemos de adaptarnos a la realidad que opera en el siglo XXI", ha señalado el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón. Consciente de estar inmersos "en un nuevo escenario social que necesita un cambio", el titular de Justicia ha recalcado que "somos un país sociológicamente conservador, que nos hace refugiarnos en la suficiente pero insegura realidad que conocemos". Asimismo, defiende "estar al frente de un proyecto" que ha de garantizar la seguridad jurídica y que "dejemos al legislador que establezca el criterio".
Alberto Ruiz-Gallardón ha realizado estas declaraciones durante el acto de inauguración de la nueva sede del Grupo Francis Lefebvre, que él mismo ha presidido, y al que han asistido destacados miembros de la carrera judicial, de la abogacía y representantes de diversos colectivos profesionales.
Acompañado por Fernando Román, secretario de Estado del Ministerio de Justicia; Ricardo Conde-Díaz, director general de Relaciones con la Administración de Justicia; Marta Silva, directora del Servicio Jurídico del Estado; Joaquín Silguero, secretario general de la Administración de Justicia; Juan Bravo Rivera, subsecretario de Justicia; Juan Pujol y José Ángel Sandín, consejero delegado y director general del Grupo Francis Lefebvre -respectivamente-, Gallardón destacó la excelencia de la labor del Grupo en beneficio de la comunidad jurídica y profundizó en el fuerte componente tecnológico de sus productos y servicios.
Ruiz-Gallardón venía de recibir, en la sede de su departamento, las propuestas de las comisiones de expertos que han analizado los cambios que cabría introducir en las normas procesales y de organización del Poder Judicial, materializados en la redacción del nuevo Código Procesal Penal y en la nueva Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ).