La reunión, que se ha prolongado 15 horas (hasta las 08:15 de hoy viernes) ha concluido sin acuerdo después de que los letrados de la Administración de Justicia, además de negarse a desconvocar la huelga para avanzar en el diálogo y la negociación, decidieran plantear una nueva propuesta al Ministerio elevando sus exigencias salariales con un planteamiento que supondría una doble cláusula de enganche.
El secretario de Estado de Justicia, Tontxu Rodríguez, que ha presidido la reunión, ha mostrado su sorpresa por esta postura del comité de huelga, que ha calificado de “insólita y contraria a la buena fe negociadora". “Cuando uno se sienta en una mesa de negociación debe partir de las demandas inicialmente planteadas y estar dispuesto a hacer alguna concesión; la única propuesta hecha esta noche por los letrados de la Administración de Justicia demuestra una clara falta de voluntad de alcanzar cualquier tipo de acuerdo".
La nueva propuesta presentada por los letrados de la Administración de Justicia insiste en mantener la cláusula de enganche, que supondría referenciar la cuantía de sus retribuciones a las de los jueces y magistrados. La nueva exigencia supone que, además de que cada letrado, individualmente, cobre el 85% de lo que perciben los jueces de sus respectivos órganos judiciales, el conjunto de la masa salarial de los letrados de la Administración de Justicia estará también referenciada a la masa salarial de la carrera judicial, lo que en la práctica supondría una doble cláusula de enganche, es decir, una doble subida salarial.
Además, el Ministerio de Justicia ha propuesto al comité de huelga estudiar una mejora de salario, basada en los grupos de población en los destinos de los letrados, que beneficiaría especialmente a los LAjs con salarios más bajos, cuestión que los negociadores han rechazado.
La actitud de los letrados de la Administración de Justicia ha sido calificada por el secretario de Estado de Justicia de “contraria a cualquier lógica negociadora" y ha lamentado la “cerrazón" del colectivo a “iniciar una verdadera negociación, después de casi cuatro semanas de huelga en las que los principales perjudicados están siendo los ciudadanos".