El titular del Juzgado de Instrucción número 2, César Gil Margareto, se hizo con el II Premio Bona Fides que anualmente otorga el Colegio de Abogados de Valladolid mediante votación de sus colegiados y que distingue la eficiencia y amabilidad y el buen trato en el sector jurídico.
En una segunda vuelta de las votaciones, que dieron comienzo a mediados de mayo, Gil Margareto se impuso al clasificado inmediatamente después, Aurelio de Paz, funcionario del Juzgado de Instrucción 3, y al tercero más votado, Javier Martín García, diputado responsable del Turno de Oficio en el propio Colegio de Abogados de Valladolid.
Durante la entrega del premio al magistrado, aprovechando la celebración de la tradicional Fiesta de la Primavera del Colegio, el decano del Colegio, Jesús Verdugo, destacó la "bonhomía" de Gil Margareto, que recogió la figura diseñada por Grañeda "agradecido" y convencido de que "es fácil hacer las cosas bien y hacerlas de buen grado".