La regulación geoespacial vigente en España surge como resultado del estudio sobre las dimensiones espaciales, abarcando no sólo las áreas terrestres, marítimas y aéreas, sino también el Espacio Ultraterrestre y sus implicaciones civiles y militares. Esta normativa también tiene en cuenta las dimensiones temporales de los datos geoespaciales, tanto terrestres como ultraterrestres, lo cual es crucial para los operadores jurídicos y técnicos.
El estudio de la regulación geoespacial busca integrar aspectos que, hasta ahora, la legislación vigente había tratado de manera independiente o descoordinada. Este análisis responde a la práctica del Derecho en asuntos privados y públicos, civiles y militares, y a la defensa legal de los derechos de los ciudadanos, abordando también el trabajo conjunto de profesionales técnicos y jurídicos, así como la perspectiva institucional de las Administraciones competentes en áreas como la cartografía, la topografía, el catastro, y la observación de la Tierra.
1. Importancia de los datos y servicios geoespaciales
El ejercicio del Derecho en el ámbito geoespacial pone de manifiesto la importancia fundamental de los datos y servicios geoespaciales. Estos tienen un impacto técnico en disciplinas como la cartografía y la topografía, y también una significativa repercusión jurídica. Es esencial comprender y aplicar un amplio conjunto de normativas legales específicas.
La interoperabilidad jurídica de los datos geoespaciales permite abordar de manera efectiva los desafíos normativos, técnicos y organizativos que plantea la aplicación de la geoinformación, incluyendo áreas estratégicas como el espacio exterior y la observación terrestre.
2. Aportación de valor añadido de la regulación geoespacial
La regulación geoespacial ofrece un valor añadido significativo tanto para la Academia como para la Industria, al sistematizar los aspectos técnicos y jurídicos relevantes para la geoinformación. Con más de un centenar de normas, esta regulación presenta una visión multidisciplinar que integra tanto la base técnica como la jurídica, abarcando desde los datos terrestres hasta la utilización de información obtenida desde el espacio exterior.
Este enfoque multidisciplinar facilita una comprensión integral y coherente de las normativas que rigen la aplicación de la geoinformación en diferentes contextos.
2.1 Herramientas y desarrollos geoespaciales
Las herramientas y desarrollos geoespaciales, cuando cumplen con la normativa técnica y jurídica, ofrecen soluciones efectivas a los conflictos legales que surgen entre particulares, con la Administración Pública, y en ámbitos tan diversos como la seguridad nacional y la defensa de la soberanía en el espacio exterior.
Un ejemplo clave es la coordinación entre el Catastro Inmobiliario y el Registro de la Propiedad. La Administración utiliza la cartografía catastral para gestionar competencias en áreas de interés para ciudadanos y empresas. Además, la defensa del espacio aéreo y ultraterrestre es esencial para proteger infraestructuras críticas y garantizar la seguridad nacional.
2.2 Digitalización y retos jurídicos
La digitalización de los datos geoespaciales ha sido un impulso crucial para el desarrollo de la geoinformación y los servicios espaciales. No obstante, este avance también plantea nuevos desafíos jurídicos, lo que hace indispensable contar con una regulación que proporcione soluciones jurídicas seguras y efectivas.
2.3 Interoperabilidad jurídica de la geoinformación
En un mundo globalizado, la interoperabilidad de la geoinformación se ha convertido en un elemento clave, no solo desde el punto de vista técnico, sino también jurídico. Este concepto es fundamental para asegurar que las aplicaciones puedan compartir datos y servicios de manera accesible, reutilizable y confiable, tanto en la Tierra como en el espacio exterior.
La Unión Europea ha reconocido la importancia de estos datos mediante el Reglamento de Ejecución (UE) 2023/138, que destaca el valor de los datos geoespaciales y de observación de la Tierra y el medio ambiente.
2.4 Enfoque transversal
La regulación geoespacial promueve un enfoque transversal que busca superar las visiones sectoriales y consolidar una visión holística de las cuestiones geoespaciales. Este enfoque permite armonizar el análisis de la realidad física con las representaciones catastrales y registrales, asegurando que estas reflejen fielmente la realidad sin distorsionarla.
Si esta regulación geoespacial logra aunar los intereses de los diferentes actores técnicos y jurídicos, podría facilitar la integración de los graduados en Ingeniería Geomática y Topografía, mejorar la coordinación entre Abogados, Notarios, y Administraciones Públicas, y fomentar el desarrollo del sector espacial ultraterrestre.
Las necesidades prácticas de los sectores técnico y jurídico en el ámbito de la geoinformación son diversas y complejas. La regulación geoespacial presta especial atención a la cartografía producida por el Instituto Geográfico Nacional (IGN) en colaboración con las Comunidades Autónomas y otros organismos.
El IGN desempeña un papel crucial en áreas como la determinación de la forma y dimensiones de la Tierra, la producción de fotografías aéreas y ortofotografías, y la vigilancia del espacio ultraterrestre, lo cual es esencial para la seguridad y sostenibilidad de las actividades espaciales.
La regulación geoespacial también se enfoca en la Topografía, representada por el Colegio Oficial de Ingeniería Geomática y Topográfica, y en la Abogacía, una profesión clave para la defensa de los derechos y libertades de las personas.
El Notariado, encargado de dar fe de contratos y actos extrajudiciales, junto con la regulación del Catastro Inmobiliario y el Registro de la Propiedad, son componentes fundamentales de la regulación geoespacial.
En 2022, la regulación geoespacial incorporó el nuevo enfoque del Ejército del Aire y del Espacio, alineado con las capacidades necesarias para la vigilancia del espacio ultraterrestre. En 2023, se añadió la regulación de la Agencia Espacial Española, que coordina las actividades espaciales en beneficio de la sociedad española.
3. Actividad espacial
El marco normativo espacial ultraterrestre es cada vez más importante. La regulación geoespacial se articula en la normativa vigente en tres áreas clave: la actividad espacial, la defensa nacional y la organización institucional. Los tratados internacionales, como el Tratado sobre los principios que deben regir las actividades en el espacio ultraterrestre, establecen una base sólida para la regulación de estas actividades.
3.1 Registro de objetos espaciales
El Registro de Objetos Espaciales es una herramienta esencial para el control y seguimiento de los objetos lanzados al espacio, asegurando su uso seguro y responsable.
En este contexto, las alertas espaciales y servidumbres relacionadas con las instalaciones espaciales son mecanismos cruciales para la protección y seguridad de las actividades espaciales.
3.2 Defensa nacional
La defensa nacional en el ámbito espacial es un componente crítico de la regulación geoespacial, con el Ejército del Aire y del Espacio desempeñando un papel fundamental en la protección del espacio ultraterrestre.
3.3 Organización institucional
La Agencia Espacial Española es responsable de la gestión y coordinación de las actividades espaciales en España, asegurando el desarrollo tecnológico e industrial en el ámbito espacial.
3.4 Doble uso civil y militar
El sector geoespacial juega un papel fundamental en el control del comercio exterior de material de defensa y de doble uso. La legislación española, junto con la normativa europea, establece un marco para garantizar que estas operaciones se realicen de manera controlada, en línea con los compromisos internacionales.
4. Conclusión
La regulación geoespacial integra más de un centenar de normas que abarcan los aspectos espaciales terrestres, marítimos, aéreos y ultraterrestres, con implicaciones tanto civiles como militares. Destaca la importancia de los datos y servicios geoespaciales en diversas disciplinas y ofrece una visión normativa amplia y multidisciplinar.
La interoperabilidad jurídica de la geoinformación es clave para resolver problemas normativos y técnicos, facilitando la accesibilidad y reutilización de datos. Además, las herramientas geoespaciales, alineadas con la normativa, proporcionan soluciones efectivas a conflictos legales y administrativos.
El enfoque transversal de la regulación geoespacial busca armonizar la realidad física con sus representaciones catastrales y registrales. Promueve la integración de profesionales técnicos y jurídicos, mejora la coordinación institucional y fomenta el desarrollo del sector espacial ultraterrestre, respondiendo a las demandas del “Nuevo Espacio” con un enfoque normativo actualizado.
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