El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha anunciado que el Partido Popular presentará varias enmiendas a la reforma del Registro Civil para que acoja la inscripción de los nacimientos por 'vientre de alquiler' en cumplimiento con la doctrina del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que defiende el derecho de filiación de estos menores.
En el debate de totalidad ante el Pleno del Congreso, donde el PSOE ha defendido la retirada del proyecto de reforma del Registro Civil, Catalá ha destacado que este texto establecerá la "obligación" de los centros sanitarios a comunicar los nacimientos y defunciones a las oficinas del Registro Civil.
Esta medida evitará que cerca de 856.000 trámites deban realizarse presencialmente por los progenitores o familiares más cercanos de los afectados y conllevará un ahorro anual de 64 millones de euros para los ciudadanos. "Casi 200 millones en tres años, y para la Administración de ocho millones", ha añadido.
A su juicio, la declaración presencial por aquellos que tengan conocimiento de estos hechos tenía sentido cuando se estableció en 1957, un momento en el que las defunciones y nacimientos se producían en los domicilios y no existían los avances tecnológicos y administrativos de hoy en día.
Centros sanitarios, como "ventanilla única"
Ahora, según ha defendido, los centros sanitarios sí que están en condiciones de ser "una ventanilla única" para tramitar esa información, con las salvedades que requieran los fallecimientos en unas circunstancias que precisen de la intervención judicial.
El titular de Justicia ha recordado que la reforma refuerza las medidas médicas y biométricas para asegurar la filiación materna y poner fin a cualquier caso de "bebés robados". Además, ha confirmado que se inscribirán en el Registro Civil los nacimientos por la denominada 'gestación por sustitución'.
El diputado socialista Mario Bedera ha celebrado esta enmienda sobre la maternidad por alquiler, cuya regulación no es "pacífica" en la Unión Europea y sobre la cual el Tribunal de Estrasburgo ha defendido el derecho de filiación de estos niños.
Tanto él, como el diputado de CiU Jordi Jané, han advertido de que la distinción entre filiación matrimonial y no matrimonial es propio de "épocas obsoletas e impresentables". Desde Compromís-Equo, Joan Baldoví ha preguntado por el "limbo jurídico" en el que quedan los menores cuyo nacimiento no han podido ser inscrito hasta el momento por ser fruto de la 'gestación subrogada'.