
El acusado admitió haber distribuido, comercializado y dado acceso no autorizado al visionado de partidos de LaLiga en establecimientos de hostelería durante las temporadas 2018-2019 y 2019-2020.
El condenado, que trabajaba como autónomo para una empresa de telecomunicaciones sin autorización para comercializar partidos de fútbol, reconoció que diseñó un sistema fraudulento para ofrecer acceso no autorizado a señales de partidos de fútbol de pago. Para ello, utilizaba dispositivos configurados con software IPTV que permitían visualizar encuentros eludiendo los canales oficiales y licencias legales.
Además, según consta en la sentencia, falsificó documentos, contratos y facturas, utilizando el nombre y los datos de una empresa real sin su consentimiento, para dar apariencia de legalidad a las ofertas que realizaba a los clientes. Además, cobró cuotas iniciales y mensuales por este servicio ilegal, sumando un perjuicio económico a los titulares de los derechos audiovisuales valorado en 3.000 euros. Durante la investigación, se incautaron varios dispositivos y se constataron las actividades ilegales en varios bares y establecimientos de A Coruña.