ABOGACÍA

El Colegio de Abogados de Granada entrega de los Botones de Oro y Plata

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El Colegio de Abogados de Granada celebró ayer el acto de entrega de los Botones de Oro y Plata que homenajean a esos letrados ‘veteranos’ que han dedicado 50 y 25 años, respectivamente, al servicio público y a la defensa de los justiciables.

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En una ceremonia solemne, presidida por el decano, Eduardo Torres, colegiado de honor, Javier López y García de la Serra, y el resto de diputados de la Junta de Gobierno, el Colegio ha reconocido la excepcional labor y dilatada trayectoria de los abogados que, en esta ocasión, han recibido la insignia por su medio y cuarto de siglo de dedicación y entrega a la abogacía. “Con estas distinciones queremos premiar la fidelidad, compromiso y perseverancia de todos estos letrados que llevan 25 y 50 años de colegiación”, ha explicado Torres.

Así, José Antonio Ruiz Rodríguez y Emilio Esteban Hanza, han recogido sus Botones de Oro por 50 años de ejercicio profesional ante el numeroso público asistente a este tradicional acto, en el que también se ha homenajeado por sus bodas de oro con la Abogacía a Simón Venzal Carrillo y Felipe María López Calera, que no han podido asistir a la ceremonia. “Esta profesión ha sido mi destino de vida, por el que he sido feliz y para mí se ha hecho extremadamente corto”, ha declarado Esteban Hanza.

Junto a estos ‘embajadores’ de la profesión, el Colegio de Abogados granadino ha otorgado los Botones de Plata a los 83 abogados que este 2017 han cumplido 25 años de colegiación. Los letrados Matías Santa Olalla y José Rojas han sido los encargados de ofrecer el discurso, en el que han hecho hincapié en cómo ha cambiado el ejercicio de la abogacía en estos últimos cinco lustros a través de historias y anécdotas.

La ceremonia -que este año se ha celebrado un día después de lo habitual para no coincidir en domingo y facilitar la participación de los colegiados- también ha contado con la concesión de distinciones a María Dolores Escudero Puga, letrada de la Administración de Justicia del Juzgado número 2 de Santa Fe, y a  María José Ruiz Braojos, gestora procesal y administrativa del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Granada. “Queremos reconocer la excelente atención y el trato que ofrecen estas dos profesionales a los abogados, que nos facilitan y hacen más fluida la relación”, ha señalado el decano.

Tras el acto, la Abogacía granadina ha puesto fin a dos semanas de festejos con un almuerzo de confraternización de los colegiados en el hotel Alhambra Palace, en el que se ha hecho entrega, además, de los trofeos de las competiciones deportivas y lúdicas de los días previos y el sorteo de regalos por parte de las entidades colaboradoras.

Culmina así la última edición del programa de Santa Teresa, en el que se han mezclado actividades de ocio (como rutas de senderismo y ciclismo, torneos de pádel, fútbol, golf o tiro y encuentros de juegos de mesa, dardos o karaoke) con eventos culturales e institucionales. En este sentido, el acuarelista Arturo Marín fue el encargado de abrir el pasado 4 de octubre la programación con la exposición pictórica ‘Crónicas granadinas’, que recorre rincones, callejuelas y miradores de una ciudad nazarí llena de los matices.

En el plano institucional, la semana pasada se celebró la tradicional reunión de ex miembros de la Junta de Gobierno del Colegio, en la que el decano, acompañado por los actuales diputados, dio a conocer a los anteriores representantes colegiales los últimos acontecimientos relativos al colectivo y las novedades previstas, a lo que sucedió la recepción de autoridades granadinas en los Jardines de Gomérez, un encuentro al que asistieron personalidades de todos los ámbitos de la sociedad.

Tampoco podía faltar en la celebración de Santa Teresa el acto de Jura o Promesa de nuevos colegiados, en el que 39 letrados hicieron pública su unión a la profesión y la Corporación, como muestra del buen estado de salud de la institución, o la Eucaristía del día 15 de octubre, en honor a la patrona, celebrada en la Iglesia de las Carmelitas Descalzas, con la participación del coro colegial.