El PAPE es el instrumento para la programación y coordinación de las políticas de activación para el empleo que desarrollan tanto las comunidades como el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) con cargo a los fondos distribuidos por este último.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, presidió este lunes en el Palacio de la Moncloa la Comisión General de secretarios de Estado y subsecretarios, en la que se han analizado las materias que se abordarán en el Consejo de Ministros de mañana, entre ellas el anteproyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado y el PAPE.
El PAPE para 2018 contiene un total de 617 servicios y programas, frente a los 538 de 2017, lo que supone un incremento del 14,7%.
La novedad más significativa del Plan es que por primera vez se recogen los objetivos-clave que utiliza la Red de Servicios Públicos de la UE para evaluar el desempeño de todos ellos.
Serán objetivos estratégidos del PAPE 2018 la activación y mejora de la empleabilidad de los jóvenes; potenciar el empleo como principal instrumento de inclusión social; la inserción de los desempleados de larga duración y de los mayores de 55 años; impulsar la formación, y mejorar el desempeño de los Servicios Públicos de Empleo, entre otros.
Todos ellos, junto a los objetivos estructurales, se evaluarán a partir un total de 27 indicadores y 44 componentes. Al igual que en 2017, se contempla que la distribución de fondos se haga completamente en función de los resultados obtenidos en los años anteriores.