La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha avanzado que del Plan Nacional de Reformas (PNR) enviado a Bruselas el pasado mes de abril solo queda por abordar "algo menos del 10%". Según ha recalcado, se trata de uno de los planes "más amplios y profundos" que están "colocando a España en la dirección correcta, la que conduce a la salida de la crisis".
Así lo ha asegurado Sáenz de Santamaría en su comparecencia ante la Comisión Constitucional del Senado para hacer balance de la actuación de su Departamento y, en especial, del cumplimiento de la reforma de las Administraciones Públicas.
Sáenz de Santamaría ha señalado que las reformas han guiado la actuación del Ejecutivo de Mariano Rajoy desde que ganó las elecciones en noviembre de 2011 y ha añadido que "cada paso ha ido afianzando la recuperación de la confianza y la credibilidad".
"En este tiempo hemos puesto en macha las grandes reformas que necesitaba nuestro país para afrontar la recuperación", ha manifestado, para destacar leyes como la de Estabilidad Presupuestaria, la reforma laboral o la reestructuración del sistema financiero.
Nuevas reformas en los próximos meses
La portavoz del Ejecutivo ha señalado que trabajan en una reforma tributaria que pretende favorecer un "sistema fiscal más justo y equitativo" que "contribuya al crecimiento económico". Según ha dicho, esa reforma será además una contribución importante a la competitividad de España.
A renglón seguido, ha precisado otras nuevas reformas que impulsará el Gobierno como la Ley de Cajas; la nueva ley de fomento de la financiación empresarial o la Ley de Desindexación que se encuentra en fase de informe y se remitirá a las Cortes el año que viene.
Regeneración democrática
Además, Sáenz de Santamaría ha situado la recuperación de la confianza en las instituciones como uno de los "grandes compromisos" de la legislatura y ha añadido que ésa es la "génesis del plan de regeneración democrática" que ha impulsado el Ejecutivo.
En este sentido, ha recordado que el pasado 20 de septiembre el Gobierno presentó un bloque de 40 medidas que afectan a más de media docena de normas divididas en tres ejes: un mayor control de la actividad económico-financiera de los partidos; una mejor definición del ejercicio de la función pública; y medidas procesales-penales entre las que se incluirán nuevos delitos como el de financiación ilegal.
"Nuestra voluntad es alcanzar un acuerdo con todas la formaciones políticas", ha proclamado, para añadir que el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, ha abierto una ronda de contactos con los grupos parlamentarios para "recabar sus aportaciones".
Así, Sáenz de Santamaría ha insistido en que el Gobierno está abierto a las aportaciones de los partidos "a lo largo de todo el debate". "Creo que tenemos la mejor base en la voluntad de abrir nuevas vías a la transparencia y cerrar espacios a la corrupción porque es el mejor incentivo para recuperar la confianza de los ciudadanos", ha señalado.
El portal de la transparencia, el año próximo
En este paquete de regeneración democrática, la vicepresidenta del Gobierno ha destacado la Ley de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Buen Gobierno, que está en tramitación en el Senado.
Dentro de esta norma, ha avanzando que la voluntad del Ejecutivo es que el año que viene esté habilitado el portal de la transparencia, que recogerá toda la información sobre la Administración, como contratos, convenios, subvenciones o ayudas públicas.