ENTREVISTA

Hugo Cortada, director de desarrollo de negocio de Serimag: "Las nuevas tecnologías de automatización y la inteligencia artificial pueden contribuir a desbloquear gran parte de los problemas del ámbito legal"

Entrevista
Hugo_Cortada

Entrevistamos a Hugo Cortada Solá, director de desarrollo de negocio de Serimag, con motivo de la próxima celebración del 5º aniversario de la presentación en la feria 'Digital Enterprise Show' (DES2018) de su solución TAAD

Hola Hugo, para todos aquellos de nuestros lectores que aún no conozcan Serimag ¿podría presentar esta empresa tecnológica?

Serimag es una empresa con sede en Barcelona dedicada, hace más de 10 años, a la automatización de procesos documentales y de backoffice para grandes compañías a través de la inteligencia artificial. Además de trabajar con el sector asegurador o el legal, damos servicio a los principales bancos españoles, ayudándoles a ahorrar tiempo y costes en la clasificación de documentación de sus clientes particulares y empresas, transformando esos documentos en datos, para crear procesos y formas de operar más eficientes. Procesamos de forma automática más de un millón de páginas al día gracias a la IA, por ejemplo, en procesos de concesión de préstamos, el pago de impuestos, las transferencias o en procesos de tasaciones.

¿Por qué apostó Serimag por la Inteligencia Artificial (IA) aplicada a la automatización de procesos?

Hace 10 años nadie hablaba de inteligencia artificial y nosotros vimos una oportunidad clara de poder utilizar esta tecnología para mejorar y hacer más eficientes los procesos y operaciones de las empresas. Como es lógico, la tecnología ha seguido avanzando, hemos evolucionado con ella y nos actualizamos constantemente, para poder prestar un mejor servicio a nuestros clientes.

En este sentido ¿cómo explicaría usted en qué consiste la automatización inteligente y, ya puestos, podría además revelarnos qué valor aporta ésta en el ámbito de los procesos documentales?

La automatización inteligente se puede definir como la incorporación de las reglas de negocio existentes en un proceso manual operado por personas, a un sistema automático e industrializado basado en inteligencia artificial. Nuestro objetivo es liberar a nuestros clientes de las tareas manuales de clasificación y extracción de datos. El sistema es inteligente porque es capaz de incorporar las mismas o más reglas que ya se estaban aplicando anteriormente al proceso, y además aprende de forma autónoma a medida que va procesando documentación.

Serimag se posiciona hoy por hoy como el referente en el mercado del Back Office automatizado para empresas en los sectores bancario, financiero y asegurador. ¿En qué radica la fórmula de su éxito?

Ofrecemos un mejor servicio que las empresas tradicionales de gestión documental (BPO) al ser más rápidos, económicos y precisos. De media, Serimag reduce un 50% el coste de procesamiento de grandes cantidades de documentación y podemos llegar a reducir de horas a segundos los tiempos operativos. En lo que respecta a la precisión, tenemos un compromiso de acierto superior al 99% en todos nuestros procesos, que es también muy superior a la media del sector. En definitiva, gracias a la tecnología y al expertise de un equipo de más de 35 personas, somos líderes en automatización documental y damos servicio a las principales compañías del país.

La solución TAAD de Serimag es mucho más que un sistema de IA. Brevemente ¿en qué consiste esta solución y qué valor o beneficios aporta a sus clientes?

El Tratamiento Automático de Documentos (TAAD) es una solución propia  de Serimag que llevamos más de 10 años desarrollando y mejorando, y que presta servicios de automatización a clientes de referencia en el mundo asegurador y bancario. Principalmente, ofrece un mejor servicio de externalización de procesos documentales en tres aspectos: coste, tiempo y precisión. Nos posiciona como un centro de ahorros o de eficiencia para nuestros clientes y es, a través de esa filosofía, donde los proyectos se facturan por volumen y por éxito, sin costes de desarrollo ni de configuración.

¿Necesita el sector de la tecnología de la automatización de procesos de una regulación específica ad hoc como se viene demandando para la propia IA, la Blockchain, la Big Data, la Machine Learning,…?

En el caso de la automatización de procesos existen pocas diferencias a la regulación existente para las empresas tradicionales de backoffice, ya que el veredicto sobre una operación lo sigue dictaminando el cliente y no una “caja negra” basada en inteligencia artificial. En el caso de los procesos documentales hay dos elementos de riesgo fundamentales a tener en cuenta: la tasa de error y la protección de datos personales. Sobre la tasa de error, existen soluciones en el mercado de lectura rápida de documentos, pero el problema es que, por ejemplo, más del 70% de los documentos de una entidad financiera son semi estructurados o no estructurados, lo que hace que esas soluciones fallen y acaben teniendo bajas tasas de acierto, lo cual puede provocar errores de gran calado para los clientes. Un ejemplo sería conceder un préstamo a un cliente en función del líquido en sus nóminas, equivocándose en el dato que se ha extraído, o confundir difunto con herederos en un testamento. Las bajas tasas de acierto provocan que, en muchos casos, se precise de equipos revisando lo que la automatización extrae, lo cual no genera ninguna eficiencia, sino una duplicidad de esfuerzos. En todos nuestros procesos nuestro acierto comprometido es superior al 99%, ya que solo trabajamos en procesos de una criticidad alta para nuestros clientes y el error tolerado es muy mínimo.

Y, en lo que respecta a la protección de datos de carácter personal, al tratar con documentación confidencial, contamos con la máxima seguridad. Aunque operamos como procesador de documentos, en ningún caso hay una custodia digital de esa información. Aún así, debemos mantener unos estándares muy altos de seguridad. Por eso, la mayoría de procesos se desarrollan en las instalaciones de los clientes, en centros de procesamiento designados por nuestros clientes o con quién tengamos acuerdos estratégicos y estén homologados para tratar con bancos y aseguradoras y que cumplan con todos los requisitos a nivel de ciberseguridad.

¿Y qué ocurre con la Ética? Efectivamente para el ecosistema de tecnologías innovadoras que comprende las de IA, RPA, Blockchain, Computación Cuántica, el uso de gemelos digitales para procesos innovadores por exaptación, etc… ¿debería procurarse necesariamente la presencia de un propósito ético a la hora de idear, acometer y desarrollar el proceso innovativo?

Son sistemas deterministas, donde no hay sesgos incorporados por el equipo, que es una de las cosas que más puede proocupar. Lo que se busca es desarrollar los mejores modelos de clasificación de documentación y extracción de datos. Hasta la fecha no vemos riesgos en ese aspecto.

Pensando en nuestro público lector compuesto mayoritariamente por profesionales del mundo del Derecho como abogados, asesores, jueces y magistrados, notarios, registradores,  etc… ¿hasta qué punto la aplicación de la IA en los procesos de automatización en procesos documentales podría suponer un remedio en el actual colapso judicial?  ¿Tienen cabida las soluciones de Serimag en el ámbito de la e-Justicia?

Las nuevas tecnologías de automatización y la inteligencia artificial pueden contribuir, sin ninguna duda, a desbloquear gran parte de los problemas del ámbito legal. No solo en una enorme reducción de costes para la administración, gracias a la reducción de tareas manuales de bajo valor añadido, como la clasificación de documentos y extracción de datos, sino también a nivel de usuario, por parte de los abogados individualmente. En este segundo caso existe un gran margen de mejora en la experiencia de usuario a través de la reducción de los tiempos medios por operación, pudiendo agilizar enormemente la mayoría de trámites y, en definitiva, haciendo más con los mismos o menos recursos. La IA y la automatización son grandes aliadas de la Justicia y los despachos.

¿Cómo cree que están ahora los despachos en lo relativo a las legal tech o al uso de estas tecnologías?

Los despachos de abogados y los departamentos legales de las grandes empresas forman parte de un sector que ha sido siempre muy tradicional, para los que la tecnología no era una prioridad. A raíz de la pandemia, el sector “se puso las pilas”  y ha evolucionado en sus modelos operativos para incorporar nuevas tecnologías que les ayudan a ser más eficientes y a mejorar la experiencia de cliente. Cada vez más, el sector está al día de las legaltech, centradas en la automatización de procesos y que incluyen herramientas para la generación de contratos legales inteligentes o robots conversacionales avanzados. La inteligencia artificial y la automatización en los despachos de abogados son herramientas valiosas que pueden mejorar significativamente el trabajo de los profesionales del derecho y parece que el sector está tomando conciencia de ello y ya estamos viendo cómo muchas de estas tecnologías están teniendo una rápida adopción en la mayoría de firmas y bufetes. El ecosistema legal ha pasado de plantearse si implementar o no todas estas tecnologías, a preguntarse cuándo y cómo.

¿Cómo cree que les puede ayudar Serimag?

Podemos ayudarles a estar en la brecha de la transformación digital con la automatización documental. La automatización mediante IA permite a los abogados centrarse en tareas de mayor valor añadido, como la estrategia legal y la negociación. Podemos aplicar el uso de la IA para automatizar tareas repetitivas, como la revisión de documentos y la búsqueda de información relevante en casos legales. También para mejorar la eficiencia y la precisión en la toma de decisiones y para ayudar a los abogados a identificar patrones y tendencias en casos anteriores. Los despachos pueden ahora llevar a cabo su trabajo de forma más rápida y eficiente de la mano de esta tecnología, que permite el tratamiento de grandes volúmenes de información jurídica. La clasificación y lectura automática de contratos, la identificación de clientes para la prevención de blanqueo de capitales o los procesos de Due Dilligence son algunos de los ámbitos que se benefician directamente de estas tecnologías. Se optimizan también formularios y plantillas inteligentes, contractuales y procesales, pero también de carácter administrativo y comercial. También destaca la lectura automatizada de documentos, que aporta un beneficio directo en aquellas áreas que requieren analizar un gran número de contratos y documentos en todo tipo de formatos y que llegan por distintos canales.

Desde Serimag ¿en qué tipo de procesos y de qué manera recomendarías al sector aventurarse en estas nuevas tecnologías de una forma segura?

Tras trabajar más de 10 años en entornos muy exigentes recomendamos no correr y no empezar a meternos en procesos que implican IA sin antes reflexionar en qué queremos centrarnos, para conseguir qué objetivos y a través de qué especialistas (internos o externos). Con nuestros clientes solemos tener una primera fase de levantamiento de procesos, lo que algunos llaman Process Discovery y, a partir de ese ejercicio, se desprenden oportunidades de mejora. Con esas oportunidades se elabora una matriz con dos ejes, eficiencia y tiempo de implantación, y en función de los recursos disponibles, se elabora un plan de oportunidades priorizadas. Como norma general, recomendamos centrarnos en los procesos principales de una organización, que es donde residen las mayores eficiencias, y trazar un plan incremental, que vaya desde prueba de concepto, a procesos totalmente automatizados, con niveles que aseguren la implicación de todos los stakeholders y que minimicen los potenciales fallos. Todo, para funcionar de forma más eficiente. En el ámbito legal eso es bueno para el prestador del servicio, ya sea la Administración, un despacho o un departamento legal, y bueno para el  usuario o cliente, ya que se pueden reducir enormemente los costes y agilizar los tiempos de cada trámite.