Desde 2007 las Notarías han sido fuertemente castigadas como consecuencia de la situación de crisis económica, y especialmente inmobiliaria que se vive en nuestro país. Esto ha conllevado que muchas hayan sufrido en los últimos años una drástica disminución de su actividad y consecuentemente de sus ingresos, que en ocasiones ha alcanzado hasta el 70% de reducción.
En un encuentro organizado por Cuatrecasas, Gonçalves Pereira, dos de sus abogados, Amparo Bru y Victoria Villanueva, analizaron la situación y expusieron las principales fórmulas alternativas para mejorar la eficiencia en las Notarías y dotar a sus plantillas de una mayor flexibilidad para hacer frente a estos últimos años de crisis económica y salir reforzados de cara a los próximos años. Un encuentro que contó también con la presencia de Juan José Martí de consultores Ogayar.
En concreto, tras un análisis inicial de la situación económica del sector se explicaron las medidas de flexibilidad externa a disposición del empresario para ajustar su plantilla al volumen de actividad, esto es, el despido disciplinario y el objetivo. Igualmente se analizaron las ventajas e inconvenientes de otras medidas mucho menos traumáticas, que parten del mantenimiento del empleo y que son conocidas como medidas de flexibilidad interna, esto es: modificaciones dentro del poder de dirección de empresario, las modificaciones sustanciales de las condiciones de trabajo, haciendo hincapié en la posibilidad de reducir salarios o variabilizarlos, así como en la posibilidad de transformar contratos a tiempo parcial pudiendo incluso compartir empleados entre notarios.
Recordaron que en términos generales, la estructura de costes que vienen soportando, y especial la estructura de costes de personal, no se han reducido en los mismos términos e iguales proporciones que los ingresos, lo que ha conllevado en muchos casos a un desequilibrio patrimonial al que es necesario hacer frente.
Pero además, las Notarías se encuentran con un problema añadido, y es que no entra suficiente trabajo para dar ocupación efectiva a todos los trabajadores en plantilla, por lo que en la actualidad, en la mayoría de los casos, las plantillas se encuentran fuertemente sobredimensionadas, por lo que resulta necesario adoptar medidas de ajuste..
Por último, se comentó la casuística concreta del sector por lo que respecta a la actividad comercial, la cual apenas se ha desarrollado por parte de los notarios y de su personal, muchas veces como consecuencia de la propia idiosincrasia de la actividad, pues no podemos perder de vista que los notarios son funcionarios públicos del estado, sometidos a determinadas limitaciones, pero otras veces, porque el negocio funcionaba bien y no era necesario salir a buscar clientes, ya que éstos entraban solos por la puerta.
En consecuencia, se puso de manifiesto que toda solución pasa no solo por ajustar los costes a los ingresos disponibles y a la carga de trabajo real, sino también por un cambio de mentalidad a lo que a la actividad comercial se refiere.