JUSTICIA

Multan por lesiones a la madre de una niña muerta por supuesta negligencia médica

Noticia

El Juzgado de Instrucción número 1 de Huelva ha condenado a Elena Masera, la madre de la niña que murió en diciembre de 2005 en el Hospital Juan Ramón Jiménez en Huelva por una supuesta negligencia médica a causa de una mortal infección tras ser operada de apendicitis, a pagar una multa de 150 euros por una falta de lesiones y otra de 100 euros por una falta de amenazas, así como tendrá que pagar una indemnización de 264 euros a una celadora del citado centro que la denunció por los hechos.

shutterstock_320912000

Según reza en la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, se declara probado que el día 13 de diciembre de 2006 sobre las 19,30 horas los denunciantes se encontraban prestando servicios profesionales en el Hospital Juan Ramón Jiménez, cuando se personó la denunciada, llamó a la puerta y le abrió la celadora, la cual le dijo que allí no podía estar, respondiendo Masera "de manera violenta dándole una torta en la cara y un golpe en el codo".

Por todo ello, tuvo que salir en su auxilio el otro denunciante, que intentó tranquilizar a Elena Masera, la que le dijo que eran "unos asesinos que habían matado a su hija".

Por su parte, la denunciada explicó en el juicio que "ese día se personó en el hospital y que llevaba una cestita de bombones con una carta en alusión a los bombones que su hija no se pudo comer y que pensaba irónicamente felicitar al personal sanitario, momento en el que perdió los papeles y tiró la cesta". Del mismo modo, explicó que lo quería era "hacer algo sutil, pero no violento y todo ello como consecuencia del fallecimiento el año anterior de su hija por una negligencia médica".

El pasado mes de abril el Juzgado de Instrucción número 2 de Huelva imputó a cuatro médicos del Hospital Juan Ramón Jiménez por un presunto delito de homicidio por imprudencia profesional, tras la muerte de esta menor, un juicio para el que aún no hay fecha.

Cuando sucedieron los hechos, en diciembre de 2005, la familia de la niña presentó una denuncia en el citado juzgado con el fin de que se investigara esta presunta negligencia en la muerte de la menor, que ingresó el 24 de diciembre de 2005 aquejada de una apendicitis y falleció tres días después a causa de una mortal infección.

En esas fechas, la madre de la menor lamentó que, a pesar de que su hija "se quejaba de fuertes dolores en la tripa y tenía fiebres muy altas tras una operación de apendicitis que los médicos calificaron de normal, los facultativos no hicieron nada por determinar el origen de estos síntomas, que desembocaron en su muerte".

La madre de la menor fallecida comentó que, a pesar de su intranquilidad y de su llamada a los médicos, "éstos insistían en que se trataba de un cuadro médico normal de un postoperatorio, que se había visto agravado por una gastroenteritis, sin que le hicieran ningún tipo de pruebas, a pesar de que se pasaban a ver a la niña a la habitación".

"AMANECIÓ MORADA Y MUY DÉBIL"

Esta situación se fue agravando, según apuntó Masera, hasta el día 27 por la mañana, en que, "después de dos noches sin dormir por los fuertes dolores y a pesar de los calmantes que le habían puesto, la pequeña amaneció morada y muy débil, por lo que fue trasladada de urgencia a la UCI, donde murió horas más tardes sin que los médicos pudieran hacer nada por reanimarla de una parada cardiaca originada por la infección".

La madre de la menor apuntó que los médicos le dijeron que la afección de la pequeña había derivado en una peritonitis que había infectado a la niña, de forma que "la inflamación que presentaba en la tripa se debía a la pus de la infección".