Para Rodrigo, “supone una gran satisfacción volver a contar con la confianza de la Firma que con esta decisión valida la estrategia desarrollada en los últimos años en el mercado español, la cual nos ha permitido profundizar nuestra posición de liderazgo entre los despachos internacionales que operan en España.”
En el proceso de elección han participado tanto los socios y responsables de las distintas áreas de servicios profesionales internos, como miembros del Comité Ejecutivo global.
Rodrigo está especializado en el asesoramiento tributario a fondos, grupos familiares y grandes empresas en materia de fusiones y adquisiciones, reestructuraciones internacionales, estructuración de fondos (capital privado, inmobiliario, infraestructuras, energías renovables) y operaciones de financiación estructurada (financiación de proyectos, financiación de activos y titulización). Es reconocido por los principales directorios jurídicos como uno de los abogados tributaristas más prestigiosos.
Patrono de la Fundación Impuestos y Competitividad, miembro de los comités fiscales de la CEOE, de la International Chamber of Commerce, de la Cámara de Comercio de EE.UU. en España y del American Business Council. Ha sido también el representante español en el grupo de expertos de la Unión Europea para la eliminación de obstáculos fiscales en las inversiones transfronterizas de capital privado.
Desde 2020, es uno de los cuatro miembros electos del Comité de Dirección de Baker McKenzie para la zona EMEA.
Baker McKenzie fue el primer despacho internacional en operar en España (1965), donde cuenta con oficinas en Madrid y Barcelona Barcelona y un equipo de más de 250 abogados. A nivel global cuenta con 74 oficinas en 45 jurisdicciones.