Entrevistamos a Roger Dobaño, CEO de Quipu, con motivo de la reciente entrada en vigor de la Ley 11/2021, de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal.
1. Hola Roger, para empezar y pensando en todos aquellos de nuestros lectores que no conozcan la solución Quipu ¿podría presentárnosla y decirnos en qué consiste y a qué publico va destinado?
Quipu es un software en la nube (SaaS) que digitaliza los procesos administrativos y financieros a pequeñas empresas, autónomos y asesorías.
Nos ocupamos de las tareas diarias de cualquier negocio, desde la facturación hasta la gestión de clientes y proveedores, pasando en todo momento por los gastos, los pagos y cobros y la conciliación bancaria.
Nuestro objetivo es que los negocios tengan la información esencial de negocio accesible y al día.
Nuestra tecnología nos conecta de forma rápida con bancos, con ecommerce, con autónomos y pequeñas empresas, y agiliza la entrada de la información administrativa en el sistema. Además, mejoramos el procesado de datos con nuestro Lector OCR, con nuestras herramientas de conciliación, lo que mejora la visibilidad de dicha información.
Estamos especializados en trabajar con asesorías que lo usan para con sus clientes. Quipu permite automatizar tareas rutinarias al asesor y mejorar la recurrencia de recepción de información. Nos conectamos con el programa de contabilidad del despacho de forma que Quipu es la herramienta de interacción con el cliente y pueden mantener su programa de contabilidad.
2. ¿Por qué decidió apostar por este proyecto? ¿Cómo surgió la idea?
Nace por un lado de mi frustración cuando fui autónomo por vez primera: lo hice todo mal. Quería crear una herramienta simple que ayudara a los negocios a conocer y llevar a cabo sus obligaciones contables y fiscales básicas.
Por otro lado, en ese momento mi socio Albert Bellonch (CTO) había empezado a desarrollar una herramienta para uso interno en Itnig, un ecosistema de startups y fondo de inversión para proyectos en una etapa inicial, del que formamos parte desde nuestro inicio. Por aquel entonces, Itnig era medio consultora tecnológica, medio incubadora, y poco se parecía a lo que es actualmente.
Nos conocimos, estuvimos valorando la oportunidad y nos lanzamos… y de eso hace más de 8 años.
3. Desde su punto de vista como creador de una Legaltech ¿Considera que España es un buen mercado para emprender? ¿Cree que en España se dan las condiciones necesarias y oportunas para emprender? ¿Necesitamos propiciar una cultura emprendedora?
España cada vez es un mejor sitio para emprender. Con el paso de los años estamos viendo más historias de éxito cercanas, se está estructurando un ecosistema de inversión más relevante, y está resultando más fácil atraer talento en ciudades como Barcelona.
España es un mercado grande dentro de Europa, y hoy en día es cada vez más obvio que existe una posibilidad real de crear una empresa en España con una gran proyección internacional. Necesitamos que la gente tenga la ambición para hacer cosas grandes, por qué el ecosistema ya existe, y los casos de éxito están ayudando a cambiar la mentalidad poco a poco.
Por otro lado, España todavía va un paso por detrás de otras economías en lo que digitalización se refiere, y la inversión en software sigue estando a años luz de las principales economías europeas. Además, los bajos salarios no ayudan a acelerar esta transformación.
4. La digitalización de la gestión supone un ahorro de tiempo ya que se eliminan tareas tediosas pero necesarias en todos los negocios y sectores. De hecho, la pandemia ha puesto en evidencia el valor que supone la automatización de procesos administrativos y bancarios ¿por qué cree que este proceso no se ha acelerado antes de la pandemia, o preguntado de otro modo, por qué la pandemia ha destapado esta necesidad?
La pandemia nos ha demostrado que se puede tener una relación remota con los empleados, clientes y proveedores. Aunque no dejaremos de tener la necesidad de vernos cara a cara, esto ha ayudado a eliminar procesos que se pueden hacer de forma digital o remota.
Durante la pandemia, las asesorías que ya usaban Quipu gestionaron la crisis de forma mucho menos traumática, y nos ayudó a convencer a más clientes de relacionarse a través con sus tareas administrativas con un software.
Lo que vemos es que crece el interés y aquellos que ya estaban medio convencidos han dado el paso, pero no será hasta la llegada de los cambios regulatorios que esto cambiará de forma significativa.
5. Gestores y asesores presentan los impuestos de forma telemática desde 2013, sin embargo ha sido la Covid-19 lo que ha hecho digital el resto del proceso si bien aún así apenas se ha logrado avanzar en restar complejidad al ciudadano a la hora de acometer sus trámites en materia de e-Administración como se demuestra con el uso de un lenguaje excesivamente técnico-jurídico a la hora de cumplimentar cualquier modelo tributario. ¿Hay un interés oculto en la Administración por evitar la comprensibilidad e inteligibilidad del ciudadano en su relación con la e-Administración?
En Quipu siempre nos hemos preocupado de explicar todos estos conceptos de forma comprensible a través de nuestro blog: nuestra experiencia con el propio software nos guía y nos ayuda a comprender mejor las obligaciones de las asesorías, de autónomos y Pymes.
Por otro lado, no creo que haya un interés oculto, pero sí creo que la ambigüedad y el lenguaje técnico es una herramienta que tiene la administración para jugar sus cartas según conviene en cada momento.
6. Desde una empresa como Quipu ¿qué cree usted que falta o sobra en el actual marco normativo tributario que permita facilitar la digitalización y la relación de los ciudadanos y empresas con la e-Administración a la hora de la realización de los trámites administrativos?
Creo que en los últimos 5 años ha habido avances muy relevantes en materia de e-Administración: hemos visto mejoras en el certificado digital, en la suma de trámites que se pueden hacer online, o en las citas previas. Para mí, este tipo de trámites son el punto de partida para empezar a ir un paso más allá.
El cambio más relevante vendrá cuando se implemente la facturación electrónica o el SII para todas las empresas. Este será el inicio de la digitalización administrativa de los negocios, un movimiento que nos llevará a una relación más directa con la Administración.
Para muchos será un paso traumático: la digitalización todavía es muy baja en este sector, pero debemos apostar por ello si queremos avanzar.
7. El pasado día 11 de octubre entró en vigor la Ley 11/2021 contra el fraude fiscal que prohíbe el uso de sistemas informáticos que manipulen la contabilidad con el objetivo de evitar falsear las cuentas de una empresa prohibiendo la utilización de software de doble uso. ¿Afecta esta medida a la solución de Quipu? ¿Qué opinión le merece esta novedad normativa?
En Quipu no nos afecta el problema, ya que nuestro software no ha permitido ni permite dobles contabilidades o la gestión de una caja B.
Al mismo tiempo siempre hemos creído muy importante cumplir con todos los requerimientos, tanto de integridad, de accesibilidad o de trazabilidad, para asegurar la mejor experiencia al usuario. El hecho de ser un software en la nube, sumado a la forma de cómo lo hemos ido desarrollando, nos permite tener mayor facilidad para cumplir los requisitos que los softwares que se instalan.
Desde mi perspectiva, esta normativa es la antesala de la digitalización y certificación de los procesos de facturación y contables.
Aún no existen especificaciones técnicas concretas, pero se prevé que sea la base para, con los años, incorporar elementos como la facturación electrónica, al igual que ya ha sucedido en otros países.
España tiene una deuda pública cada vez mayor. El COVID lo ha agravado todavía más, y las ayudas de Europa irán cada vez más condicionadas al cumplimiento de acciones que luchen contra el fraude fiscal y la economía sumergida.
8. Y para terminar, pensando en nuestro público lector compuesto principalmente por profesionales del mundo del Derecho e integrantes de despachos, asesorías, departamentos jurídicos de empresas, etc. ¿Por qué les recomendaría apostar por Quipu?
En pocos años será obligado el uso de software para cumplir con las obligaciones relacionadas con la facturación y la administración del negocio.
En Quipu apostamos por aquellos despachos que tienen como objetivo ser más rentables, y que tienen la visión de ofrecer una relación más síncrona con su cliente. Estos es clave para anticiparse hoy a los cambios venideros.
La ventaja de empezar hoy es que permite cambiar la forma de trabajar de modo gradual, y que nos permite diferenciarnos del resto.
Tenemos la experiencia de trabajar con centenares de asesorías de todo el país. Nuestro compromiso no es solo proporcionar una solución tecnológica pensada para las necesidades del despacho, sino que nuestra forma de trabajar e involucrarnos con las asesorías aseguran el éxito de la puesta en marcha.