Así la acusación pública acreditó que durante el mes de septiembre de 2018, el Juzgado de Primera Instancia número 4 de Lugo requería a la acusada que dejara al padre ver a su hijo, según los términos previamente acordados "sin dilación" y sin poner impedimentos.
El régimen de visitas se había acordado en junio de ese mismo año 2018, y, sin embargo, la mujer no los cumplía. Tras el requerimiento del juzgado, la madre trató de buscar otras opciones para impedir que el menor volviera a ver a su padre y presentó, según la Fiscalía, un escrito de oposición a la medida.
Para evitar las visitas, aportó un informe de alta relativo al menor en el cual se señalaba que el niño debía "evitar el contacto con adultos hasta la resolución del cuadro" de su enfermedad, así como no poder salir del domicilio.
La acusación pública mantenía que ese documento, supuestamente emitido por el servicio de Urgencias del HULA, es falso, y que la mujer lo presentó con el fin de engañar al juez y así poder evitar que el padre estuviera con el pequeño cuando le correspondía.
La abogada ha puntualizado que se había "llegado a una conformidad, se ha alcanzado un acuerdo con la investigada en este asunto y se va a zanjar con una pena mínima que no se llegará a cumplir porque es una persona que no tiene antecedentes".
La letrada ha explicado que son "seis meses" de prisión, al "reconocer" la mujer "los hechos".