"Es claro que si una hipoteca ha sido titulizada, el banco deja de ostentar la legitimación, por lo tanto hay nulidad de actuaciones y volvemos a la casilla de inicio", explica satisfecho Juan Ignacio Navas, socio-director del bufete Navas & Cusí que ha logrado la suspensión de la ejecución.
No es la primera vez que se paraliza una ejecución tras demostrarse que la hipoteca había sido titulizada. El 6 de marzo de 2015 el juzgado nº 1 de Fuenlabrada (Madrid) suspendía una ejecución de Credifimo tras demostrarse haber sido cedida al fondo de titulización TDA25.
Credifimo trató de "subsanar" alegando que tenía legitimación por encargo de la cesionaria, pero el juzgado recordó que "la carencia de legitimidad es insalvable, no subsanable", citando la sentencia 24/2013 del Supremo. La sentencia de Fuenlabrada argumentó también que "el crédito hipotecario sale de la entidad emisora" y concluye que "carece de legitimidad para instar el despacho de la ejecución complementaria" en aplicación del principio de legalidad procesal.
"Está claro que existe una transmisión o cesión de crédito según el 149.1 de la Ley Hipotecaria y que el responsable legal del crédito hipotecario tras la cesión es la sociedad gestora, no el banco", explica Navas. "Otra cosa es que sea complejo poder demostrar que el crédito ha sido titulizado en su integridad; la información está legalmente depositada en la CNMV pero encontrarla no es nada fácil", añade. "Incluso nos han llegado a sugerir que fuéramos con una lupa", critica.
El pasado 6 de noviembre de 2015 el juzgado de 1ª instancia nº 5 de Salamanca también suspendió una ejecución hipotecaria de Barclays Bank tras demostrarse que la hipoteca había sido titulizada y que el banco "pretendía ocupar la posición procesal" de la sociedad gestora, señaló la sentencia.
También el Supremo se ha pronunciado sobre la falta de legitimación del cedente en caso de cesión. La sentencia del 22 de mayo de 2014 de la Sección Primera de la Sala de lo Civil señala que la cesión de contrato es un negocio jurídico trilateral en la que el cedente, el cesionario y el cedido deben compartir la misma voluntad. "En el caso hipotecario la ley establece que no se tiene obligación de consultar al hipotecario, pero no dice que el vendedor siga ostentando el título o la legitimidad sobre el crédito; ni tampoco que el hipotecario pierda el derecho de adquisición preferente, el tanteo y retracto", señala el socio-director de navascusi.com
En el caso juzgado por el Supremo –una promotora sobre plano que cede sus derechos a un tercero- la sentencia declara la resolución por incumplimiento esencial: "imposibilidad juridica" de cumplir con sus obligaciones al haberlas cedido a un tercero.
"Estas sentencias novedosas está poniendo de manifiesto el reproche judicial de ejecutar una acción sin tener la debida legitimidad; un paso adelante en la defensa de los clientes bancarios en la que vamos a seguir trabajando", concluye Navas.