En lo sucesivo, la ley de la residencia habitual del difunto se aplicará a toda la sucesión. No obstante, se dejará al ciudadano la opción de elegir la ley de su nacionalidad para la liquidación de su sucesión. Los notarios de Europa se muestran asimismo satisfechos por la creación de un certificado sucesorio europeo (CSE), que constituirá la prueba de la calidad de heredero en todos los Estados miembros y facilitará considerablemente los trámites que deben realizar los derechohabientes (por ejemplo hijos menores de edad y mayores incapacitados).
En la mayoría de los Estados miembros de la Unión Europea, los notarios son los principales interlocutores en las cuestiones relacionadas con el Derecho de sucesiones. Por este motivo, a partir de este momento, se movilizan en aras de una aplicación rápida y eficaz del nuevo Reglamento europeo:
- En la web www.successions-europe.eu, ponen a disposición de los ciudadanos las fichas informativas sobre el derecho de sucesiones de los 22 Estados miembros que cuentan con notarios, en 3 lenguas: francés, inglés y la lengua del país en cuestión.
- Además, los notarios de Europa respaldan activamente la interconexión de los registros nacionales de testamentos emprendida por la ARERT (Asociación de la Red Europea de Registros de Testamentos), que permite que un notario consulte un registro extranjero a través de su registro nacional. Actualmente, están interconectados 15 registros nacionales, facilitando de este modo la búsqueda de las últimas voluntades de los difuntos en Europa.
- En colaboración con la ARERT, los notarios de Europa trabajan asimismo en la creación de registros nacionales de Certificados Sucesorios Europeos y en su interconexión. Así, los registros belga, francés y luxemburgués estarán interconectados de aquí a finales de año.
Jean Tarrade, presidente del Consejo de los Notariados de la Unión Europea (CNUE) ha declarado: «La entrada en vigor del Reglamento europeo sobre las sucesiones internacionales es una fecha que constituye un hito. El texto va a facilitar la vida de los ciudadanos y de los profesionales encargados de las sucesiones, como los notarios. Hacemos un llamamiento para que las instituciones europeas sigan trabajando en esta vía y lideren la unificación de las reglas de conflictos de leyes a escala europea en otros ámbitos, como los regímenes matrimoniales, las consecuencias patrimoniales de las parejas registradas o la capacidad jurídica de las personas vulnerables».