Jacob Haubbi: "En la abogacía desafortunadamente no se permite una conciliación como tal, pues como bien sabemos, la abogacía es una profesión muy estricta"

Un año más, celebramos el Día Internacional de la Abogacía Joven

(Ver especial completo Día de la Abogacía Joven)

Con motivo de este día, entrevistamos a Jacob Haubbi, presidente de los Abogados Jóvenes de Tenerife.

- Se acercan fechas señaladas para tod@s, la Navidad, y la Abogacía ha pedido que se declare la inhabilidad procesal de este periodo. ¿L@s abogad@s consideráis que vuestra profesión permite la conciliación?

Con el ordenamiento jurídico vigente, en la abogacía desafortunadamente no se permite una conciliación como tal, pues como bien sabemos, la abogacía es una profesión muy estricta, ya que estamos supeditados a los plazos que nos marca el Juzgado sin que se tenga presente nuestra situación personal. Ejemplo de ello ha sido donde compañeras nuestras no les han suspendido los señalamientos cuando estaban dando a luz a sus hijos.

Por ello ha sido importantísima la propuesta iniciada desde la Confederación Española de la Abogacía Joven (CEAJ), para intentar conseguir una conciliación en la abogacía.

- El Consejo General de la Abogacía Española ha urgido a incluir en el Proyecto de Ley de Eficiencia Procesal que se contemple la enfermedad del profesional de la abogacía como una causa para la suspensión de vistas y procedimientos. ¿Cómo es la situación actual?

En relación a lo que manifestábamos anteriormente, es muy importante que se produzca dicha incluso, ya que actualmente, existe una regulación muy escueta sobre las enfermedades del abogado. Recordemos que en la LEC solo existe el artículo 188 que sirve para la suspensión de vistas pero no para suspender plazos y/o procedimientos. Además que dicho artículo mencionado en su apartado 5ª, solo se menciona la suspensión para la imposibilidad absoluta de poder asistir a la vista. Asimismo, dicho precepto expresa que la suspensión la determinará el Letrado de la Administración de Justicia, es decir, se deja en manos de un tercero la libertad de decidir de si lo ocurrido es motivo suficiente para suspender o no, lo cual provoca que estemos ante un método totalmente subjetivo y nada objetivo.

- Sobre las respectivas candidaturas a las elecciones a Decano y a Presidencia de las AJA de los colegios de abogados ¿echas en falta algún requerimiento de idoneidad que debiera tenerse siempre en cuenta e incluirse en la propuesta de las candidaturas?

Es requisito imprescindible que toda aquella persona que se vaya a postular tanto a Decano como a Presidente de la AJA tenga que ser una persona con grandes ambiciones para mejorar el colectivo. Esta aptitud siempre tiene que tener como pareja a la honradez y la lealtad, pues con ellos se obtendrá un buen resultado que se traducirá en un gran programa que no tendrá otra finalidad que crear un sistema para que la comunidad de los abogados se vea beneficiada.

- ¿Cree que la denominación del colectivo Abogados Jóvenes debería cambiarse por la de Abogados de Reciente Colegiación (ARCO) evitando así discriminar por razón de edad?

En absoluto, el término Abogados Jóvenes no provoca la discriminación por razón de edad. De hecho en nuestra Agrupación para evitar que precisamente exista esta supuesta discriminación por razón de edad, tenemos establecido en nuestros estatutos que será Joven Abogado toda aquella persona que tenga menos de cuarenta (40) años de edad o bien menos de diez (10) años de ejercicios en la profesión. Al utilizar esta conjunción “o” lo que hacemos es abrazar al mayor número de abogados, pues compartiendo opiniones con compañeros más veteranos, todos nos han comentado que la madurez de la abogacía se llega a los diez (10) años de ejercicios. Por ello, para no cerrar las puertas a todas las personas que no se han podido sacado la carrera alrededor de los veinte años, hemos implementado esta fórmula citada.

- Antes de la pandemia y tras ella, todos los profesionales han incidido en la importancia de la transformación digital, ¿qué cambios y avances habéis experimentado en vuestra profesión? ¿Podemos decir que “avanzamos hacia la innovación jurídica”?

Es innegable que la pandemia ha obligado a los Juzgados y Tribunales a realizar una transformación digital, la cual hemos podido comprobar de cerca a través de sistema Cisco WebEx que es el programa utilizado en Canarias, para realizar las vistas, juicios, declaraciones, etc., de forma telemática. Hasta hace poco ello era algo impensable, pero dado a los acontecimientos se han visto obligados a implementar este tipo de prácticas, pues de lo contrario toda la sociedad se vería perjudicada, ya que conllevaría una ralentización de la justicia.

Si bien es cierto todavía queda un largo camino para perfeccionar la digitalización en la justicia, pero lo importante es que ya se está integrando.

- Al igual que la innovación jurídica, la formación de todos los operadores jurídicos es de gran importancia, ¿en qué materias y/o áreas es necesario que los abogados se sigan formando?

A colación de lo anterior, relativo a la transformación digital, hemos podido comprobar como la tecnología a día de hoy está avanzando a niveles agigantados.

Por ello una de las áreas del Derecho que tiene una mayor proyección, es todo aquello que tenga que ver con la tecnología como por ejemplo la big data, el blockchain, los smartcontract, la inteligencia artificial, ya que como se ha podido comprobar en los últimos años es una materia que se está implementando poco a poco en el Derecho evidenciándose así que le auspicia un gran futuro. Por lo que ahora es un buen momento para formarse en ello.

- Algunos colegios impulsan el “mentoring” y el “coaching” para facilitar el inicio del ejercicio a los abogados jóvenes. ¿Cómo valoras estas iniciativas? ¿crees que sería conveniente potenciarlas aún más?

Como mencionaba en mi intervención del pasado día 30 de septiembre en el Congreso Nacional de Abogacía Joven organizado por CEAJ, esta profesión es a la par de dura y maravillosa, donde encontraremos bastantes dificultades a lo largo del camino y esas dificultades podemos eludirlas si contamos con un buen mentor a nuestro lado que nos pueda guiar desde su experiencia y así cometer el menor número de errores. Lógicamente, se cometerán errores, pues toda persona los comete, pero el objetivo es que tu mentor te los ahorre, por esta razón es muy importante tener esta figura. Asimismo, se ha de comentar que no todos pueden tener un mentor a su lado, por ello entra en juego las Agrupaciones de Jóvenes Abogados, las cuales tienen que tener como principal objetivo la formación constante y ayuda incesante a los jóvenes abogados, para suplir así la falta del mentor.