"Los abogados laboralistas debemos fomentar medidas de flexibilidad en las empresas"
La modernización de la Seguridad Social
-En primer lugar, enhorabuena por su nombramiento. ¿Qué retos se plantea a corto y medio plazo como representante de los abogados laboralistas españoles?
Muchas gracias. Me gustaría que mi mandato al frente de la Asociación cumpliera dos objetivos fundamentales. Por un lado hacer que la voz y opinión de los abogados laboralistas tenga presencia relevante en todos los ámbitos, desde la Administración a los medios de comunicación y, también, como interlocutor ante los órganos de gobierno de los Tribunales. Y por otro, hacer que la Asociación sirva de punto de encuentro y de foro de debate y reflexión para todos los laboralistas, incrementando su pluralidad y la actividad formativa, de divulgación y de investigación que ya viene realizando.
-Actualmente los agentes sociales se hallan en busca del encuentro sobre la reforma laboral; entre las cuestiones más espinosas, destacan el acercamiento de posiciones en la evolución de los salarios, el coste de los despidos o la contratación a tiempo parcial, ¿qué podemos esperar de esta reforma que, según fuentes ministeriales, ha de estar lista en el primer trimestre del año?
Como presidente de una Asociación marcadamente plural no creo que deba expresar una opinión sobre el contenido material de las reformas que deberían abordarse. Pero sí creo que es opinión general entre los laboralistas que las reformas laborales acordadas por los interlocutores sociales tienen una eficacia mayor que las que no lo son.
Dicho eso, es evidente que el Gobierno está en su derecho, y quizás en su obligación, de impulsar la actividad legislativa reformadora, también en materia laboral, en una situación de crisis como la que padecemos.
-¿Qué expectativas podemos tener de este 2012 en el mercado laboral? ¿Se vislumbra por fin una mayor flexibilidad y un cambio de tendencia en las contrataciones?
Lamentablemente es muy posible que el año 2012 siga siendo un mal año para el empleo. Pero los laboralistas tenemos que hacer lo posible por impulsar fórmulas alternativas que permitan parar la destrucción del mismo y faciliten su conservación aún en situaciones de crisis, como son las medidas de flexibilidad interna dentro de la empresa.
En todo caso, habría que impulsar medidas específicas y coyunturales que fomentaran la contratación, especialmente de jóvenes, con incentivos reales que la hagan atractiva para las empresas, especialmente las pequeñas y medianas.
-Al congelar el salario mínimo interprofesional, ¿existe el riesgo de que el sistema de la seguridad social pierda número de afiliados, tal y como vienen denunciando algunos agentes sociales?
No creo que la congelación del salario mínimo vaya a influir en el número de afiliados a la Seguridad Social. Lo que hay que lograr es un impulso económico que permita reactivar la actividad económica, y eso es lo que tendrá un impacto directo en las afiliaciones y en la sostenibilidad del sistema de Seguridad Social.
-Hablemos de medidas legislativas aprobadas en materia laboral. Como experto en materia laboral, ¿qué valoración puede hacernos de la reforma de la negociación colectiva? ¿Refuerza el protagonismo de la empresa?
La reforma de la negociación colectiva del año pasado fue muy limitada y, en mi opinión, de eficacia prácticamente nula para alterar la estructura de la misma. De todas formas, es oportuno preguntarse si el convenio de empresa es una solución que haya de generalizarse, porque mi percepción es que no es así, y que hay quedar espacios de libertad, especialmente en las pymes, pero sin pretender que el convenio sectorial es la fuente de nuestros problemas laborales.
- ¿Y de la Ley de actualización, adecuación y modernización de la Seguridad Social, especialmente en el capítulo de la reforma de las pensiones?
En mi opinión, la reforma del sistema de Seguridad Social en la citada Ley fue muy acertada y de impacto muy importante, dentro de la gradualidad que es necesaria cuando se toca una materia tan sensible y de afectación general al conjunto de los ciudadanos. Ahora hay que dejar que produzca sus frutos, que los producirá, sin pretender volver a partir de cero como si fuera inservible.
-Incluida en esta reforma, se encuentra la regularización de las empleadas de hogar, entrando en vigor el pasado 1 de enero. ¿Esta situación puede generar situaciones de fraude, ya que la ley no obliga a exigir tanto al empleado como al empleador la verificación de la afiliación a la Seguridad Social?
Pueden darse tales situaciones, pero la norma era necesaria y, en su conjunto, mejora claramente la situación de tales empleados.
-Por último, algo que quiera destacar.
No está de más recordar que las normas laborales no son la solución a los problemas económicos, pero sí deben ser cauce de ideas para que cuando éstos aparecen, el marco laboral no sea un obstáculo insalvable para las adaptaciones que son necesarias. Y en eso los laboralistas tenemos mucho que decir, y las Asociación que los representa debe tener un protagonismo fundamental en el debate y propuesta de soluciones.
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Martín Godino Reyes es socio director de Sagardoy Abogados. Director general de la Fundación Sagardoy, es miembro del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid desde 1986.
Licenciado por la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Madrid. Doctor en Derecho por la Universidad de Alcalá de Henares. Master en Derecho del Trabajo y Seguridad Social. Diplomado en la Escuela de Práctica Jurídica de la Universidad Complutense de Madrid. Profesor de Derecho del Trabajo en la Universidad Carlos III de Madrid. Profesor en el Master de Asesoría de Empresas de ESIC. Profesor del Master en Abogacía Laboral de la Fundación Sagardoy.
Premio al Mejor Laboralista del Año 2006, otorgado por la Asociación Nacional de Abogados Laboralistas, en Octubre de 2006.
Autor de publicaciones en materia laboral y de Seguridad Social.