En el fallo de la extensa sentencia de 72 folios también se recogen otras relevantes condenas para los otros procesados según su grado de participación en los hechos, así como el pago de las correspondientes indemnizaciones a los familiares de la víctima y el pago de las costas. Además, y como ya sucediera en anteriores sentencias de la misma naturaleza, se decreta la disolución de la banda juvenil ‘Los Trinitarios’.
Esta resolución aún no es firme y contra ella cabe la interposición de correspondiente recurso de apelación ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
Según el relato que expuso la Fiscalía durante la celebración de la vista oral y se recogía en su escrito de acusación, en septiembre de 2016, cuatro acusados, todos ellos miembros activos de la banda juvenil citada, estaban en las inmediaciones de la Plaza María Paz Unciti junto a las otras cinco personas procesadas.
Pese a que el grupo se dividía entre militantes activos de la banda y simpatizantes, la Fiscalía manifestó que todos ellos actuaban de mutuo acuerdo. Por lo que, cargados con machetes, cuchillos, navajas y botellas de cristal, se lanzaron hacia la banda rival, Los Ñeta “con absoluto desprecio hacia su vida e integridad física”.
Según el Ministerio Público, lo hicieron de forma “organizada, rápida y sorpresiva” para evitar la capacidad de reacción de sus víctimas. Uno de los jóvenes de la banda rival, menor de edad, falleció a consecuencia de las puñaladas y otro resultó herido de gravedad.