El Código Penal ha sufrido una reforma parcial, pero no aislada. Se encuadra dentro de un compromiso de mejora de la administración de Justicia, según fuentes del Ministerio de Justicia. Con esta reforma se ha pretendido homogeneizar las respuestas a las necesidades de las sociedades democráticas europeas. Atiende a nuevas formas de delincuencia y se protege a colectivos hasta ahora desfavorecidos, víctimas del terrorismo, de violencia de género, de racismo y xenofobia; agricultores y ganaderos. Las líneas inspiradoras de la reforma son: - Actualización de las respuestas a nuevos delitos. - Incremento de la seguridad jurídica. - Incorporación de obligaciones internacionales. - Mejorar la proporcionalidad del sistema de penas. Las principales novedades introducidas en la reforma penal, son la inclusión de la prisión permanente revisable, delito de financiación ilegal de partidos políticos, protección de animales, etc.