El candidato afirma que desde el Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid hay que ser contundentes ante la relativización de la profesión.

Juan Gonzalo Ospina, candidato a decano del ICAM: “La Abogacía del futuro debe ser integradora, moderna, adaptada al cambio e influyente”

Entrevista
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Continuamos con una ronda de entrevistas semanal con los candidatos y candidatas a las elecciones del próximo 20 de diciembre para conocer las principales claves del Colegio de la Abogacía del futuro.

(Ver especial completo Elecciones 2022 Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid)

Con motivo de las elecciones del próximo 20 de diciembre, entrevistamos a  Juan Gonzalo Ospina, candidato a Decano del ICAM.

El candidato tiene cuatro propuestas claves para el Turno de Oficio, apuesta por la digitalización y el papel 0, ofrece una propuesta amplia en la que están representados todos los sectores de la abogacía, y asegura que implantará el voto electrónico y una intranet con reconocimiento facial para todos los colegiados y colegiadas.

¿Cuáles son las claves del Colegio de la Abogacía del futuro?

La Abogacía del futuro tiene que entender todas las sensibilidades y realidades de la profesión. Tenemos que ponernos en los zapatos de todos aquellos que se dediquen al ejercicio profesional desde la abogacía, desde la asesoría jurídica de la empresa hasta el turno de oficio, los grandes despachos y pasando por los medianos despachos, por jóvenes y por seniors. ¿Por qué? Solo desde la unidad podemos afrontar con contundencia esos grandes retos que están a la vuelta de la esquina. Por ejemplo, la digitalización.

Tenemos que apostar por la digitalización real y el papel 0. Lo que no es de recibo es que nos obliguen a meter las demandas por LexNET pero que tengamos que enviar tres copias en papel. Lo que no es de recibo es que los acontecimientos de la Audiencia Nacional, los procedimientos que existen no tengan dentro del mismo acontecimiento los folios enumerados, no es de recibo estar celebrando una vista en donde no hay papel y solo el juez y el fiscal tengan acceso a la carpeta virtual. Por tanto, la digitalización y la transformación desde el mundo analógico al mundo sin papel necesitan que la Abogacía lidere ese cambio, esa adecuación a la realidad del futuro

Otro de los grandes retos que tenemos por delante es la fortaleza del derecho de defensa. Existe una especie de relativismo institucional ante nuestra profesión que tenemos que cortar de raíz. Me estoy refiriendo a que algunos jueces se le pasa por la cabeza escuchar la conversación de un abogado y un cliente. A que un inspector de la agencia tributaria decide intentar que el abogado de empresa vulnere el secreto profesional. A que el legislador no considere, pregunte, escuche a la abogacía ante las reformas y lo cambios de normas de nuestro país.

Hay que ser contundentes ante la relativización de la profesión. Nos hemos encontrado con algún político que dice que este tramite se puede hacer sin abogado. Esto es un problema para el justiciable no para el abogado, porque siempre los más fuertes van a tener asesoría jurídica. Sin embargo, al vulnerable no va a tener defensa. Por último, es importante la defensa de los derechos fundamentales. La abogacía tiene que liderar el respeto y las garantías de los derechos fundamentales a través de las redes sociales. Hoy en día hemos caído en una legislación, en un marco internacional en donde el derecho al honor, a la intimidad, a la información veraz depende de los grandes buscadores e inclusive de las redes sociales. En España y en la UE necesitamos que se protejan los derechos fundamentales hasta las últimas consecuencias y la abogacía tiene mucho que decir al respecto.

Para sintetizar, la Abogacía del futuro tiene que ser moderna, adaptaba ante el cambio y el cambio es la internacionalización de nuestra profesión y, por último, quiero que exista una abogacía incluyente y relevante ante los retos que existen en el futuro en la protección siempre de los derechos fundamentales.

En opinión de Silvia Madrid, directora legal de UniCredit y candidata a vicedecana, la abogacía del futuro debe ser “integradora de todos los sectores de la abogacía desde los abogados de empresa, hasta los abogados que se dedican a compliance y todos los pequeños, medianos y grandes despachos”.

Usted está al frente de la plataforma «Ahora Abogacía», ¿Quiénes forman parte de su candidatura?  ¿Cuáles son los criterios para formar parte de su equipo?

Tenemos el mejor equipo que identifica todas las sensibilidades y cualidades del colectivo. Hay un pilar que pivota este proyecto que es Silvia Madrid quien viene de la asesoría jurídica de empresa, que tiene experiencia internacional, ha vivido en Nueva York, trabajado para departamentos financieros de distintas entidades bancarias, viene a poner en valor el liderazgo femenino, el talento, la meritocracia. Va a romper ese techo de cristal que quedan, va a apostar por la igualdad y sobre todo por el papel de la abogacía en la asesoría jurídica en la empresa. Una abogacía de 360º en donde tienen unas necesidades que no están siendo escuchadas como pueden ser la interlocución con distintos departamentos de las empresas, estar del lado del negocio, del lado de los recursos humanos, motivar ante posibles riesgos. Tendrá un papel crucial.

También, a Julia Clavero, nuestra Tesorera, quien viene de la abogacía del Turno de oficio, del mundo del derecho de familia. Representan el éxito de la defensa del derecho de las mujeres y trabaja en ABA Abogadas. Jesús Andújar lleva más de 30 años en el Turno de oficio y con más de 20 años dando clases en el Colegio. Es un ejemplo de que queremos construir un Colegio nuevo, pero respetando los éxitos del pasado. Llevamos como Bibliotecario a Felipe Debasa Navalpotro, doctor en Derecho y profesor de la Universidad Rey Juan Carlos, con esto queremos hacer un guiño a la universidad, al mundo académico, porque vamos a potenciar el mundo académico para que las universidades de Madrid sientan en el ICAM un punto de apoyo para mejorar sus oportunidades de negocio y su interlocución con las instituciones.

A Diego Solana para potenciar todo el ámbito internacional. La presencia del ICAM con sus acuerdos en Iberoamérica, en el mundo anglosajón, en África y en Asia. Tenemos que hacer una llamada a los países de nuestro entorno para potenciar el arbitraje, para potenciar acuerdos con otros Colegios de Abogados, con el mundo de la empresa.

A Pilar Sánchez Breda, es un referente en el mundo de la digitalización, del metaverso, del legaltech y que va a poner al Colegio a la altura de las circunstancias, entre ellas la propuesta del voto electrónico. Este último va a ser nuestra prioridad. Incorporar el carnet digital, con un wallet digital, para no llevar el carné en papel y que te permita firmar documentos desde el teléfono móvil.

También, Juan Ramón Montero Estévez, es la experiencia en la candidatura, lleva en el Colegio desde la época de Antonio Pedrol Rius un referente y decano respetado por todos en aquella época. Decano del Colegio de Abogados de Madrid, presidente del Consejo General de la Abogacía Española y presidente de la Unión Iberoamericana de Colegios de abogados, entre otros cargos oficiales de gran relevancia.

Llevamos a Jose Ignacio Vega, Abogado del Estado, socio en Ramón y Cajal, con un guiño para los que salen de la función pública y se incorporan a nuestro colectivo. Además, Adal Salamanca Cabrera y Yolanda López Casero que vienen de las Big Four, una realidad de la abogacía de Madrid que tiene que tener lugar con voz y voto en la junta de Gobierno. Sergio Garcia-Valle que lleva dos legislaturas en el Colegio y que es una muestra que el talento hay que respetarlo y aplaudirlos y no eliminarlo por una cuestión de clientelismo, de amistad.

En las secciones queremos potenciar que tengan una independencia económica, con una dotación de 10.000 euros al año para que puedan invitar, traer ponentes, organizar cursos.

Marien Ramos es una abogada de origen dominicano, con un guiño a los abogados extranjeros y en especial a los latinos. Marien representa la realidad de muchas personas que llegan a Madrid con un país de acogida y por eso, el derecho de extranjería y en concreto, las citas con el Ministerio de Justicia estarán bien representados.

Tenemos a Eva Serrano, presidenta de la Asociación Española de Mujeres Empresarias de Madrid (ASEME), proveniente del mundo de la empresa y dedicada al Turno de Oficio. Creemos que su aportación es imprescindible para que Madrid se convierta en la capital mundial del Derecho.

¿Cuál debe ser el papel del ICAM en la Abogacía española?

Tiene que ser líder, tiene que ser considerado. Tiene que influir y eso solo puede llevarse a cabo con palabras. Debe ser así con hechos y con una autoridad moral y no con una potestas a la que parece ser que nos han tenido acostumbrados durante los últimos cinco años. La autoridad hay que ganársela y eso nos lo ganamos con respeto, admiración del colectivo. ¿Cómo lo vamos a hacer? Queremos que Madrid sea vista como un lugar de oportunidad para el resto de los Colegios de la Abogacía de España. No vamos a entrar en el Consejo General de la Abogacía Española como un elefante en una cacharrería.

Nosotros venimos a sumar, a trabajar, y venimos a aportar ideas que mejoren el conjunto del colectivo. Queremos que todos los Colegios nos vean como un Colegio hermano. Que sientan Madrid como su casa y que, desde la energía, la fuerza y el sacrificio de Madrid, sientan que se puede mejorar la abogacía. Y conseguir ser líderes en las propuestas ante las reformas legislativas. Si hay que mejorar la ley de enjuiciamiento criminal, que se Madrid la que sea disruptiva y tome la iniciativa y la delantera ante las reformas que se tienen que llevar a cabo para fortalecer los derechos de las investigaciones criminales o de los detenidos. Si hacemos una reforma en mediación, que sea Madrid la que se imponga de manera voluntaria, y que se haga proselitismo de la mediación. Si hablamos de fortalecer las instituciones de la democracia, que desde Madrid se exija saber quiénes son los juristas de reconocido prestigio que forman parte del CGPJ cuando sean nombrados por parte de los dirigentes políticos. Madrid tiene que estar, tiene que hacer, ser, estar para conseguir su sitio como lugar de influencia.

Con respecto al voto electrónico, Silvia Madrid asegura que “esto será lo primero que hagamos al poner el pie en Serrano, 9.”

¿Cómo van a interactuar con los abogados y abogadas durante los próximos cinco años?

Vamos a hacer consultas telefónicas, vamos a intentar que los colegiados se acerquen a nosotros y nos deje su número de teléfono para enviarles un SMS. Vamos a intentar poner una línea de consultas a través de WhatsApp, potenciar todas las redes sociales. Queremos aportar un contenido que llame la atención de los colegiados para que estén en las redes sociales del ICAM. Tanto Facebook, Twitter, TikTok, Instagram. Todas las que sean necesarias. Porque si no estás, no existes. No quiero un Colegio que sea seguido por su colectivo como un lugar activo.

Hablando de digitalización, ¿Qué van a proponer?

Queremos crear un programa de gestión de despachos, una intranet de acceso fácil y a la vanguardia. Para acceder con código PIN  o con reconocimiento facial. Una vez en nuestra intranet se tienen que abrir un mundo de posibilidades, que sean acuerdos con buscadores jurídicos en el que puedan tener acceso a varias bases de datos, Que en esa intranet exista también un programa ad hoc de gestión de despachos para gestión de agenda, email. Una oficina virtual que permita desviar llamadas de ocio y de la realidad profesional. En esa intranet, me gustaría también que se pudieran ver el Aula de Formación continúa que será de formación gratuita, constante a la abogacía que quiera participar. Serán acceso libre a la plataforma de formación con videos de los cursos virtuales. Quiero meter al Colegio de lleno ante los retos del siglo XXI y esa intranet tiene que ser una puerta a un mundo de oportunidades.

¿Cuáles son las medidas respecto del Turno de Oficio que propone?

El Turno de Oficio hay que defenderlo con propuestas concretas, serias y realizables. Nosotros respetamos y haremos propuestas que mejoren el turno. La primera, nos comprometemos a digitalizar todos los trámites con la Administración de Justicia. Esto quiere decir que cuando uno atiende a un justiciable, tiene que rellenar una sábana con los datos. Desde la intranet a la que me he referido antes, espero que el Colegio del siglo XXI del papel 0, permita al letrado interaccionar con la comisión del turno de oficio y, por ende, con las Administraciones, desde su teléfono móvil. Por tanto, papel 0. La segunda propuesta del Turno de Oficio, es buscar los acuerdos con Jefatura Provincial y con AENA para tener zonas de aparcamiento.  Y si no llegamos a solución con AENA, el Colegio de la Abogacía se compromete a reservar esos espacios y a pagarlos con nuestro presupuesto.

La tercera propuesta es que no nos comprometemos a negociar con la Comunidad a que todas las actuaciones del turno se cobren.

Hay actuaciones del Turno que no se cobran y esto se acabó si yo soy decano. Cuando haya que designar letrados del Turno para defender personas jurídicas, a día de hoy no se cobra. Esto se va a acabar. No vamos a dejar a los compañeros del turno desamparados y si nos amonestan desde el Ministerio de Justicia, que designen un abogado del Estado.  No vamos tolerar ninguna actuación que no se cobre. Mi cuarta propuesta se refiere a los baremos. Es imprescindible actualizar los baremos. Haremos curso de formación gratuitos de reciclaje para los compañeros. Y vamos a permitir que se pueda renunciar a clientes dentro del turno. Este Colegio tiene que estar del lado de los colegiados, no de frente. No he escuchado ninguna medida mejor de las que acabo de enumerar.