A juicio de la asociación las novedades introducidas contienen mejoras en el Estatuto Jurídico de los secretarios,que pasan a denominarse letrados de la Administración de Justicia, si bien cuestiones esenciales como la especialización profesional y las libranzas se condicionan a una reforma del Reglamento Orgánico que no parece que vaya a producirse en esta legislatura.
Según ha indicado a Europa Press la portavoz de la asociación, Verónica Ezcurra, la nueva norma apuesta porque todos los altos cargos sean de libre designación, en vez de apostar por un auténtico sistema profesional que motive a la capacitación, la formación y la cualificación.
"Es cierto que esta reforma potencia la figura del Secretario Judicial, hoy Letrado de la Administración de Justicia y contiene mejoras en nuestro Estatuto Jurídico", reconoce, sin embargo, poniendo de manifiesto que los letrados de la Administración de Justicia son una figura esencial y vienen asumiendo nuevas funciones desde mayo de 2010, habiéndose aumentado las mismas en más de un 30 por ciento.
La recién aprobada Ley de Jurisdicción Voluntaria que, entre otras cuestiones les otorga competencia para celebrar matrimonios y decretar divorcios. "Asumimos cada vez más funciones tradicionalmente encomendadas a la carrera judicial y lo hemos hecho sin ninguna contraprestación económica, lo que no es justo", añade.
La nueva LOPJ, además de modificar la denominación de la profesión, convierte a estos letrados en directores de la Oficina Judicial y mantiene las tres categorías profesionales tratando de evitar la actual injusticia que se produce permitiendo que un Letrado con categoría tercera que desempeñe sus funciones en un destino de segunda perciba el sueldo íntegro de segunda.
Les otorga, además, nuevas competencias en materia de mediación y prevé la posibilidad que sean encargados del Registro Civil. También reconoce nuevos derechos como el de libranza y el de especialización. Se reconoce el derecho a que las asociaciones de Letrados de la Administración de Justicia sean oídas, un paso que, en opinión de la UPSJ resulta "insuficiente"
También prevé que el nombramiento de los Letrados de la Administración de Justicia del Tribunal Supremo sean de libre designación. "Entendemos que este sistema (la libre designación) debería erradicarse de nuestra profesión y apostar porque todos los altos cargos (estos, así como los Secretarios de Gobierno y Coordinadores Provinciales) o jefaturas compitan en un concurso de méritos que garantizaría que pudiera elegirse a los más preparados", indica Ezcurra.
