El tribunal le impone además el pago de una multa de siete meses con una cuota diaria de seis euros y una indemnización de 129 euros por los tres días que la víctima tardó en curar sus lesiones y 625 euros en concepto de daños morales.
Los hechos probados relatan que el demandante estaba trabajando como relaciones públicas en un local de la capital salmantina cuando se acercaron un grupo de jóvenes, entre los que se encontraba el acusado -ambos conocidos del colegio- para ofrecerles un descuento en las consumiciones. Aquel le respondió con una patada diciéndole reiteradamente “por maricón”. El perjudicado le reprochó su comportamiento y el acusado, con ánimo de humillarle públicamente y menoscabar su integridad física le propinó un puñetazo en la cara diciéndole una vez más “por maricón”. La intervención de los amigos que le acompañaban, con los que había estado bebiendo alcohol, obstaculizó que continuara con su actitud hostil personándose poco después en el lugar una dotación de Policía Local. El acusado, en presencia de numerosas personas, incluido uno de los agentes, dijo en voz alta: “cómo está el país, a ver si por un maricón de mierda voy a tener algún tipo de problema”.
El tribunal expone que del examen ponderado de la prueba practicada “se alcanza la convicción de que el investigado llevó a cabo una actuación con expresiones verbales reiteradas y agresión que conlleva menosprecio y humillación” además de atentar contra la dignidad de la víctima, y todo ello por pertenecer al colectivo homosexual”.
AP de Salamanca. Sección nº 1. Sentencia nº 34/2024 de 20 de junio de 2024.
