Con este premio, Nueva Mutua Sanitaria rinde un homenaje al impulsor, creador y presidente durante años de una institución con más de seis décadas de atención y dedicación a los abogados, al tiempo que perpetúa su esfuerzo vital durante 45 años, como catedrático y jurista de reconocido prestigio, por fomentar el talento y la excelencia entre los profesionales del ejercicio de la abogacía.
Los premios, que estarán dotados con diploma acreditativo del mismo y 500 €, se entregarán a un total de 121 nuevos abogados colegiados en los diferentes Colegios de Abogados de España.
Para poder optar al premio se requiere estar colegiado como abogado ejerciente con fecha posterior al 15 de septiembre de 2020 así como estar en posesión del título de Grado o Licenciatura en Derecho y del Master de Acceso a la Abogacía en cualquiera de las universidades españolas y haber obtenido en ambas titulaciones una nota superior a 8,0 ponderada con base 10.
Las candidaturas podrán presentarse hasta el 15 de octubre de 2021, a través de un formulario on line que se ha habilitado a tal efecto y que todo colegio que participe en la iniciativa facilitará a sus colegiados a través de una comunicación vía email.
El periodo de valoración de los candidatos se extenderá desde el 16 al 31 de octubre de 2021 y el periodo de comunicación a los premiados y la coordinación con cada colegio para el acto de entrega se extenderá a lo largo de la primera quincena de noviembre.
El Jurado estará integrado por miembros nombrados por cada Colegio y los premios se otorgarán a los candidatos en función del criterio estricto del expediente académico.
Antonio Hernández-Gil, una persona ejemplar
Antonio Hernández-Gil, por encima de su extraordinario currículo, fue una persona ejemplar. Nacido en Burgos en 1953, cursó la Licenciatura de Derecho en la Universidad Complutense de Madrid con Premio Nacional Fin de Carrera y Premio Extraordinario del Doctorado.
La capacidad docente fue otra de sus muchas virtudes y en 1974 inició la docencia en la Universidad Complutense de Madrid. En 1983 obtuvo la Cátedra de Derecho Civil en la Universidad de Santiago y en 1986 de Derecho Civil en la UNED.
Su capacidad intelectual y su amplio conocimiento del derecho, le condujeron en 2010 a la elección de Académico de Número de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación y un año después fue designado Doctor Honoris Causa por la Universidad Pontificia de Comillas.
Compaginó la docencia y el ejercicio de la abogacía con su presencia en órganos de administración de diferentes compañías
